España se queda atrás en el despliegue de banda ancha
España ha doblado en seis años el porcentaje de hogares con conexión de banda ancha a Internet, pero aun así se ha quedado atrás en relación con el resto de la Unión Europea, de acuerdo con los datos publicados hoy por Eurostat: 67% de penetración frente al 72% de la media de Europa.
En 2006, el índice de penetración de la banda ancha en España se situaba en torno a la media comunitaria (29% frente a 30%). En 2012, en cambio, la media europea alcanza ya el 72% mientras que la española se ha quedado rezagada en un 67%. La diferencia es mayor aún con países como Francia o Alemania, que hace un lustro presentaba unos datos similares a los de España y ahora se sitúan bastante por encima de la media (77% y 82%, respectivamente).
El retraso es preocupante porque, según la Comisión Europea, cada 10 puntos porcentuales de aumento en la cuota de banda ancha, que ofrece la mayor rapidez de conexión, puede generar un aumento de punto o punto y medio del PIB, y mejorar en otro tanto la competitividad. De ahí que la comisaria europea de Agenda Digital, Neelie Kroes, quiera convertir ese tipo de red en la máxima prioridad de su departamento durante 2013.
El pasado mes de julio, Kroes ya dió un giro de 180% en su política al respecto, al anunciar que dejaría de imponer rebajas en los precios mayoristas, un cambio que pretende alentar la inversión de las grandes compañías del sector. En los últimos años, Bruselas forzaba a esas compañías, la mayoría antiguos monopolios, a abrir su red a otros competidores a precios ventajosos. Los gigantes del sector aseguraban que esa política reducía la inversión y retrasaba el despliegue de redes de alta velocidad. Kroes ha acabado por aceptar ese argumento.