Rubalcaba aisla a Tomás Gómez y antepone el proyecto político a las primarias
El líder del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha logrado que nadie en el Consejo Territorial apoye al madrileño Tomás Gómez en demanda de un congreso extraordinario, y que los barones avalen una agenda de reformas en el proyecto socialista que relega las primarias como pronto a finales de 2014.
Tomás Gómez se ha erigido en protagonista de la jornada al reclamar "generosidad" a Rubalcaba y a su Ejecutiva para que cedan el testigo a personas nuevas con ideas nuevas, lo que ha sido interpretado por los asistentes como una petición para que se celebre un congreso federal extraordinario.
Sin embargo, el madrileño se ha quedado solo y, en nombre de los barones autonómicos, el presidente asturiano y coordinador del cónclave, Javier Fernández, ha dicho que la propuesta les ha parecido "extemporánea" a él "y a todos los miembros del Consejo Territorial"; "a todos menos a Tomás Gómez", ha recalcado.
En una reunión en la que el propio Rubalcaba ha comunicado que la idea de la Ejecutiva es celebrar las primarias para elegir al candidato a la Moncloa entre las Europeas de junio de 2014 y las Autonómicas y Municipales de mayo de 2015, esta propuesta no ha sido rebatida por ninguno de los asistentes, según han confirmado a Efe algunos de los presentes, que han interpretado ese "silencio" como un aval a la dirección.
Rubalcaba no ha desvelado si tiene intención de repetir como candidato en las generales de 2015 y al ser preguntado si concurrirá a las primarias se ha limitado a responder que "¡Dios dirá!".
Antes de que comenzara el encuentro, el presidente del PSOE y de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, consideraba que era una "frivolidad" que los socialistas se enzarzaran en discusiones internas sobre primarias mientras el paro crece cada día y el Gobierno se dedica a privatizar servicios sanitarios.
Sin embargo, para el secretario general del PSOE en Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, es saludable que se hable de este asunto, porque eso significa que a los ciudadanos les importa lo que ocurre en el partido y no le dan la espalda.
Durante la reunión, los socialistas se han emplazado a acotar más los plazos en el Comité Federal del próximo 12 de enero, que supondrá el inicio de un proceso de revisión completa de su proyecto político para convertirlo en alternativa de gobierno.
Este proceso culminará en una "gran conferencia" en octubre que aunará las tres que estaban programadas en un plazo de tres años: la orgánica, la política y la económica.
Hasta entonces, y durante todo el 2013, el PSOE celebrará cinco "miniconferencias" sobre un nuevo modelo fiscal, el sostenimiento del Estado social, el crecimiento y el empleo, Europa y la democracia, abiertas a los ciudadanos progresistas a fin de que formulen sus propuestas para la reforma constitucional o la nueva estructura federal del Estado.
Griñán se ocupará de dirigir la ponencia sobre el modelo territorial, para lo cual contará con un informe elaborado por la Fundación Alfonso Perales.
No obstante, los socialistas son conscientes de que necesitan el concurso del PP tanto para su reforma territorial como para la constitucional, con la que pretenden, por ejemplo, que la sanidad sea incluida como un derecho fundamental.
Se trata de diseñar un proyecto alternativo al PP y ofrecerlo a la ciudadanía lo antes posible, que será sometido al escrutinio de las urnas al año siguiente, el 2014, cuando se celebran elecciones europeas.
Para Rubalcaba, ha llegado el momento de abordar la reforma de la Constitución para mejorarla y hacerla más fuerte y a la vez para recuperar el consenso social, institucional y político que, en su opinión, ha roto el PP.
La apuesta socialista es avanzar hacia un Estado federal, blindar los derechos sociales dentro de la Carta Magna para que no puedan ser recortados por ningún gobierno, avanzar en la participación ciudadana y modificar el funcionamiento de los partidos y el régimen electoral.
Así, a la vez que se rearma ideológicamente el PSOE ofrece a los ciudadanos una alternativa al gobierno del Rajoy, al que ha criticado duramente y al que ha acusado de generar una crisis institucional y social.
En su comparecencia, el líder del PSOE se ha comprometido a estar al lado de los profesionales sanitarios y educativos y, en general, de cualquier ciudadano "indignado" con los recortes y ha asegurado que cuando los socialistas vuelvan al Gobierno echarán para atrás el proceso de privatización de los hospitales públicos.