Rivera, el benjamín de los candidatos, logra el grupo propio para Ciutadans
Albert Rivera es el benjamín de entre todos los carteles electorales y con 33 años recién cumplidos ha logrado lo que en 2006, cuando se presentó por primera vez a unas autonómicas catalanas, parecía un sueño lejano: convertirse en una formación con 9 diputados y grupo parlamentario propio.
Licenciado y máster en Derecho por ESADE y postgrado en Derecho Constitucional por la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB), Rivera (Granollers, Barcelona, 1979) dio sus primeros pasos laborales en La Caixa en 2002 y, dos años después, pasó a formar parte, como letrado, de la asesoría jurídica de esta entidad financiera catalana.
Rivera irrumpió de forma llamativa en la escena política catalana como cabeza de lista de Ciutadans en 2006, con un cartel electoral en el que posaba desnudo. Tras sortear poco después una crisis interna en su partido, Rivera consiguió estabilizar esta formación política y consolidarse como su líder indiscutible.
Aficionado a las motos y a la velocidad, su carrera política ha sido también meteórica. En 2008, se presentó a las elecciones generales por la circunscripción de Barcelona y, aunque no resultó elegido, se convirtió en el candidato a la presidencia del Gobierno más joven de la historia de la democracia española. En 2010, repitió como candidato a las catalanas.
Este joven abogado, que tiene fama de ser uno de los políticos catalanes más elegantes y más atractivos -le gusta cuidar mucho su imagen-, concurre ahora por tercera vez a unas elecciones autonómicas en las que busca dar la sorpresa.
De hecho, todos los sondeos pronosticaban un espectacular crecimiento de Ciutadans, al otorgarle entre seis y ocho diputados frente a los tres que consiguió en su debut en 2006. Pero la realidad le ha dado uno más: nueve escaños.
Su "desnudez" y "transparencia" como político y como persona parecen haber calado en la sociedad catalana, y con un discurso claro y contundente en favor de la unidad entre Cataluña y España, Rivera puede arañar votos de otros partidos de ámbito estatal, como populares y socialistas.
El candidato de C's, que se declara admirador de líderes políticos como Martin Luther King y Nelson Mandela por haber sido unos "luchadores natos que han nadado contra corriente", y de Josep Piqué (PP) en el terreno nacional, ha hecho de la "racionalización" de la administración, la reactivación económica y la lucha contra la corrupción los ejes de su programa electoral, junto a la defensa de la "unidad" de España y el bilingüismo.
Rivera ha destacado, desde muy joven, por una brillante oratoria, hasta el punto de que en sus años universitarios participó en una liga de equipos de debate por toda España, que acabó ganando.
Esta capacidad comunicativa le ha llevado a protagonizar más de un apasionante debate en el Parlament con otro gran comunicador como oponente: el presidente de la Generalitat y candidato de CiU, Artur Mas.
En sus inicios políticos, Rivera popularizó los "speaker's corner" -discursos improvisados en plena calle al estilo anglosajón- y es uno de los candidatos más activos en las redes sociales: en twitter tiene casi 28.000 seguidores.
En esta cuenta, se puede descubrir que una de sus comidas preferidas es la fideuá o que "La vida de Brian" y "Filadelfia" son algunas de sus películas favoritas.
De padre catalán y madre andaluza, Rivera compagina la política con la familia -su compañera Mariona y su hija Daniela- y su pasión por el deporte, sobre todo, la natación -fue Campeón de natación de Cataluña con 16 años-, pero también la bicicleta o las motos, además de ser un ferviente culé.
Siempre que puede, saca tiempo para leer algún libro, sobre todo biografías o libros de política general. Y si algo no soporta en su vida cotidiana es viajar en AVE y quedarse sin cobertura.