Un paseo por las sucursales en busca de crédito para las pymes
Las pymes son también grandes perjudicadas de la eurozona. A pesar de las medidas desarrolladas por el BCE para reactivar el flujo del crédito las entidades se muestran recelosas a la hora de prestar dinero. La alternativa que ofrecen en su lugar son las líneas de mediación ICO cuyos precios son los más competitivos.
El crédito a las pequeñas y medianas empresas continúa estancado. Esta es la conclusión después de visitar las sucursales de las principales entidades en búsqueda de dinero con el que financiar nuevos proyectos. La alternativa que ponen a disposición de los clientes se limita a las líneas de crédito que concede el ICO. Y la razón que alegan los empleados de banca comercial es simple: en una situación como la actual con unos elevados costes de financiación, los precios más competitivos son los que ofrece el Estado.
La crisis de deuda que vive la eurozona, y más concretamente los países de la periferia, está pasando factura a las empresas, hecho que ha resaltado el BCE en su séptima encuesta sobre el acceso a la financiación de las pymes en los países del euro. Según la información recabada por el regulador, el incremento de los tipos ha encarecido los préstamos otorgados a las compañías en Italia, España, Grecia y Portugal. La otra cara de la moneda la representan Alemania, Bélgica y Francia que hasta la fecha sobreviven e incluso sacan provecho de las crisis de deuda que azota a los países del sur.
Las medias adoptadas por el regulador para aliviar la contracción que se vive desde hace más de un año parece que no están dando sus frutos. Las megainyecciones de liquidez efectuadas en diciembre de 2011 y febrero de este año no han servido de mucho. El dinero sigue sin llegar a la economía real.
En un sistema en el que las pymes y el consumo son el principal impulso motor de la economía las dificultades que las primeras encuentran en el camino crecen por momentos y las barreras para acceder al crédito son las principales. La desconfianza de muchas entidades ante el aumento de la morosidad y la dificultad para captar fondos ha llevado a la banca a seguir adelante con su política del puño cerrado.
Los datos que maneja el Banco de España así lo demuestran. Si julio fue un mes negro para los créditos a los hogares y pymes, agosto profundiza esta tendencia. En concreto y si se compara con el mismo periodo del año anterior, la caída anual de los créditos que las entidades han otorgado a las familias y pymes ronda el 5% hasta los 1.698 billones de euros, niveles que no se veían desde el 2007. Esta situación contrasta con la que viven las administraciones públicas. Desde agosto de 2011 los créditos otorgados por las entidades han aumentado un 40% pasando de los 86.692 millones a los 122.048 millones.
La coyuntura que atraviesan las pymes repercute de manera muy significativa en el conjunto de la economía. A la crisis se suma las dificultades para obtener dinero que acaban lastrando la recuperación del empleo. Los pequeños empresarios se ven atados de pies y manos y ante el fracaso de sus proyectos cierran la puerta a la creación de nuevos puestos de trabajo.
Si las entidades no conceden créditos por los elevados precios ¿qué alternativa les queda? Las líneas de mediación ICO son la salida en los últimos tiempos. El ICO por medio de los bancos y cajas presta fondos a las empresas que lo necesiten. Sus precios, que se actualizan cada quince días, suele rondar el 5% y a día de hoy son la vía más barata, e incluso en ocasiones, la única que ofrecen las entidades.
Dentro de las líneas ICO existen diferentes opciones algunas de ellas orientadas a atender las necesidades puntuales de liquidez, otras destinadas a la apertura de nuevos negocios e incluso algunas que fomentan el desarrollo de proyectos en el exterior.
Las condiciones financieras son fijadas por instituto de crédito aunque son las entidades las que asumen los riesgos de impago, analizan la viabilidad de las operaciones, establecen las garantías a exigir y deciden o no sobre la concesión de la financiación.
A través de las líneas de mediación el ICO ha concedido 10.045 millones en los nueve primeros meses del año. Los préstamos destinados a financiar las necesidades de liquidez se han llevado hasta la fecha 6.307 millones, un 26,6% más que en el mismo periodo del año anterior. Por medio de la línea ICO-Inversión se han otorgado a las pymes 3.292 millones de euros. El resto se lo reparte las líneas ICO- Emprendedores (119 millones de euros), ICO- Internacionalización (190 millones), ICO-Exportadores e ICO-Garantías (135 millones).