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Los expertos esperan un nombramiento rápido

El nuevo secretario del Tesoro, una decisión clave para el nuevo presidente

Uno de los primeros nombramientos que se esperan de Barack Obama es el del nuevo secretario del Tesoro, toda vez que Tim Geithner no seguirá un segundo mandato. Este perfil es clave para negociar el ajuste del déficit.

Tim Geithner, secretario del Tesoro de EE UU
Tim Geithner, secretario del Tesoro de EE UU

Tim Geithner, el que ha sido secretario del Tesoro de Estados Unidos durante el primer mandato de Obama, no seguirá a partir de enero de 2013. En un momento en el que la economía es la cuestión política de primer orden en Estados Unidos (y en el resto del mundo) y con la negociación del déficit pendiente, la elección del responsable económico del Ejecutivo se antoja clave.

Los expertos en la política estadounidense esperan, precisamente por la urgencia de negociar el pacto fiscal, un nombramiento rápido. De hecho, podría ser el primer miembro del gabinete en ser anunciado, como señaló el ex jefe de gabinete de la Casa Blanca Bill Daley. Pero el nombre no está tan claro.

Uno de los que aparece en las quinielas es Jack Lew, jefe de gabinete de Obama, ex ejecutivo de Citigroup y experto en cuentas públicas. Fue responsable presupuestario con Clinton y con el propio Obama. Su nombramiento sería una señal sobre el compromiso del Gobierno con el control del déficit.

El principal problema para Obama es que, dado que el partido republicano controla la Cámara de Representantes, para el Gobierno es vital que el secretario del Tesoro tenga capacidad para negociar con la oposición en un contexto de polarización con pocos precedentes.

Erskine Bowles, que fue jefe de gabinete de Clinton, podría jugar el papel de intermediario entre los grandes partidos. Fue nombrado, junto con el republicano Alan Simpson, para diseñar un plan de recorte de déficit cuando, hace algo más de un año, los partidos no lograban llegar a un acuerdo sobre el techo de gasto. Al final, Obama no aceptó el plan propuesto por Simpson y Bowles, lo que sirvió a los republicanos para atacar al presidente.

Estos dos perfiles, adecuados para afrontar el riesgo del "precipicio fiscal", carecen sin embargo de la experiencia de Geithner en crisis económicas y economía internacional. Y tanto las relaciones con China, la crisis de la deuda en Europa serán dos tareas prioritarias del nuevo secretario del Tesoro.

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