La gran industria recibirá 700 millones de subvención por su factura eléctrica
El Gobierno va a aumentar en 150 millones la subvención que reciben los colosos industriales en la factura de la luz, una partida de la tarifa de acceso que superará los 700 millones en 2013. Soria quiere compensar así la subida de los costes de la industria, provocados por el nuevo impuesto a la generación, lo que podría considerarse una ayuda de Estado.
El Gobierno empieza a reconocer lo pernicioso del impuesto del 6% a la generación eléctrica que establece el proyecto de ley de medidas fiscales al sector energético que se tramita en el Parlamento. La presiones de los grandes grupos industriales, alarmados por el coste para su producción de un tributo que les repercutirán las eléctricas (la industria básica prevé un encarecimiento del 16%), ha llevado a Industria a poner un nuevo parche en la tarifa de acceso que pagan todos los consumidores.
Así, una orden ministerial que el departamento que dirige JoséManuel Soria ha remitido a la Comisión de la Energía (CNE), introduce unamejora sustancial del llamado servicio de interrumpibilidad, por el cual la gran industria conectada en alta tensión recibe una compensación en su factura eléctrica a cambio de que REE les pueda parar la producción de sus fábricas en caso de saturación del sistema.
La retribución actual de 20 euros/MWh subirá a 35 euros/ MWh, aunque solo para los clientes con más de 100 MW de potencia contratada, según la orden ministerial. Esta diferencia se traduce en 150 millones que recibirán cinco plantas de los tres grandes grupos industriales: ArcelorMittal, Alcoa y Asturiana de Zinc. El año pasado el coste de la interrumpibilidad (una partida de la tarifa de acceso) fue de 500millones y el Gobierno la recortó en 60 millones en el primer paquete de medidas energéticas aprobado en marzo.
Como esta medida tiene una vigencia de un año, la subvención total en 2013 superará los 700 millones. Malestar entre las eléctricas En el sector eléctrico ha sorprendido sobremanera que la misma razón que el Gobierno alegó para recortar en marzo esa compensación a la industria por un servicio en la actualidad innecesario, dado el exceso de capacidad del sistema (sirva como ejemplo el que los ciclos combinados están funcionando al 20% de su capacidad), sean los mismos que esgrime ahora para aumentarla.
En este sentido, el texto legal señala que "en el momento actual nos encontramos en una situación de baja demanda de energía eléctrica y de un riesgo de déficit en capacidad instalada que se estima reducido". Y justifica la subida de la retribución a las muy grandes, para "perfeccionar y ajustar la valoración de la prestación de dicho servicio al actual contexto de baja demanda, primando a aquellos consumidores que aportan un valor potencia más alto en todos los periodos horarios".
El propio ministro de Industria reconoció ayer, en un acto celebrado en la sede de la CNE, que el citado aumento de la subvención por interrumpibilidad tiene como objetivo "compensar el aumento de los costes que sufren los grandes consumidores". Estas declaraciones ponen en evidencia, según fuentes jurídicas, que este mecanismo es una ayuda de Estado que podría perseguir la Unión Europea.