El FMI pide más tiempo para que España, Grecia y Portugal recorten el déficit
La directora gerente del Fondo Monetario Internacional, Christine Lagarde, ha echado un capote a los países del epicentro de la crisis de deuda europea: ha pedido que España, Portugal y Grecia tengan "más tiempo" para implementar las políticas de austeridad.
La directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde, ha insistido hoy en que el tiempo es "esencial" a la hora de que España y otros países de la eurozona con problemas de deuda afronten su consolidación fiscal. "Es lo que abogamos para Portugal, para España, y lo que estamos abogando para Grecia", ha asegurado la titular del FMI en una rueda de prensa con motivo de la asamblea anual con el Banco Mundial (BM) en Tokio. Lagarde reiteró además en que este último país requerirá dos años adicionales para asimilar su programa de consolidación fiscal.
No a las metas nominales
Lagarde consideró que no es sensato establecer metas "nominales", sino aplicar las medidas y permitir que los mecanismos estabilizadores lleven a cabo su función. "A veces es mejor tener más tiempo para las políticas de austeridad, es lo que preconizamos para España, para Portugal, y también para Grecia", ha dicho la ex ministra de Finanzas de Francia.
En concreto, Lagarde ha considerado que Grecia "necesitaría" otros dos años "para afrontar el programa de consolidación fiscal" impuesto por la 'troika' -el FMI, el Banco Central Europeo (BCE) y la Comisión Europea-, lo que implicaría retrasar hasta 2016 la meta de reducir el déficit al 2,1%.
A este respecto, la directora gerente del organismo internacional ha recordado que "la eurozona es el epicentro de la crisis", por lo que ha instado a sus líderes a tomar "más medidas y con mayor rapidez", aunque también ha valorado las políticas que han implementado.
En este sentido, ha alabado las políticas adoptadas por los bancos centrales, tanto por el BCE como por la Reserva Federal de Estados Unidos y el Banco de Japón. "Han tomado muy buenas decisiones que han generado un impulso que debemos aprovechar", ha considerado.
No obstante, la ex ministra de Finanzas ha advertido de que la actuación de los bancos centrales no será suficiente para salir de la crisis, por lo que ha instado a los países miembro del FMI a tomar "acciones valientes y de cooperación".
De forma específica, Lagarde ha apuntado a la necesidad de completar la reforma del sistema financiero, combatir los niveles de desempleo, "sobre todo entre los jóvenes, que en algunos países son terroríficos", y avanzar hacia el equilibrio presupuestario, todo ello a corto plazo.
Ralentización
En este contexto, ha admitido que, en contra de lo que el organismo internacional previó en su reunión de primavera, el crecimiento económico se ha ralentizado. "No esperamos una recuperación fuerte. Va a haber recuperación, pero va a ser más lenta", ha alertado.
La jefa del FMI lo ha atribuido "al grado de incertidumbre que hay en muchas economías del mundo, como las europeas y la estadounidense". "Está socavando los esfuerzos de recuperación, impidiendo el crecimiento económico", ha sostenido.
Además, ha advertido de que, en contra de lo observado hasta ahora, "la ralentización de la recuperación económica no solo está afectando a las economías desarrolladas, también a las economías emergentes, especialmente en Asia".
Caso español
En el caso español, el FMI se ha mostrado muy pesimista con las previsiones de crecimiento del Gobierno, que preveía una contracción del 0,5% en 2013 y el organismo internacional lo ha rebajado hasta el 1,3%.
Lagarde, subrayó hoy en Tokio "la amenaza" que suponen las altas tasas de paro y la creación insuficiente de empleo, especialmente en el caso de los más jóvenes.
Viñals apoya a España
El director del departamento de Mercados Monetarios y de Capital del FMI, José Viñals, ha hecho un llamamiento a cooperar con España, si finalmente el Gobierno de Mariano Rajoy solicita al BCE que active el nuevo mecanismo para comprar deuda soberana, el OMT."Si se diera el caso de que deciden activar este mecanismo y someterse a un grado adecuado de condicionalidad, sería esencial que los países acreedores no se negaran a la activación del OMT para España o para cualquier otro país", ha dicho Viñals a la agencia de noticias Reuters.