Portugal sube el impuesto sobre la renta para atajar el déficit público
El Gobierno portugués está decidido a ahorrar 4.000 millones de euros desde ahora hasta 2014.
El ministro de Finanzas, Vítor Gaspar, anunció ayer una batería de medidas recaudatorias que sustituirán a la polémica propuesta de rebajar el sueldo de manera generalizada, ampliamente protestada en la calle y retirada después. Gaspar informó de que se reducirán
los tramos del impuesto de la renta, de ocho a cinco, a fin de recaudar más, y añadió que la tasa media que los portugueses pagan al año pasará del 9,8% al 11%. Los funcionarios y pensionistas, eso sí, que habían visto volatilizarse hace un año sus dos pagas extras,
podrán recuperar una de ellas.
En el fondo, el dinero que el Gobierno pretende ahorrar es el mismo que con la medida protestada y retirada aunque, según el ministro de Finanzas, la naturaleza progresiva del Impuesto de la Renta hará que los trabajadores, a la postre, se queden algo mejor que con la bajada general de salarios, que llegaba al 7%. Gaspar añadió que el Gobierno también seguirá ejecutando un presupuesto restrictivo en cuanto a gastos y confirmó que tiene la intención de aplicar una tasa sobre las transacciones financieras y crear un impuesto especial que grave los inmuebles cuyo valor exceda el millón de euros.
Después de que el Ejecutivo haya anunciado el incremento de impuestos, la expectación se centra en conocer cómo reaccionará la oposición. Para hoy jueves hay anunciadas dos mociones de censura, convocadas por el Partido Comunista Portugués y el Bloque de Izquierda.
Y el sindicato CGTP, además, está a punto de anunciar una huelga general. Gaspar recordó que el país aún vive "momentos críticos" y que el próximo 8 de octubre, en Luxemburgo, la Unión Europea deberá aprobar la séptima franja del préstamo que hace un año y medio sacó a Portugal de la bancarrota. Una manera de recordar que la troika -que conoció estas medidas antes que los portugueses- vigila de cerca los movimientos de los portugueses.