La incertidumbre sobre la petición de rescate devuelve la prima de riesgo a 430

El nerviosismo regresó ayer a los mercados de deuda debido a la incertidumbre sobre la petición de España del rescate. El propio vicepresidente de la Comisión Europea, Joaquín Almunia, animó ayer al Gobierno a solicitar las ayudas cuanto antes. La prima subió 22 puntos, a 430, mientras el Ibex perdió un 0,08%.

La semana ha comenzado floja en los mercados. Después de la importante mejora que experimentaron renta variable y fija en las últimas sesiones, la prudencia se ha instalado de nuevo en las decisiones de los inversores. El Ibex recortó el 0,08%, mientras que el nerviosismo volvió a plasmarse en los mercados de deuda, donde la prima de riesgo subió 24 puntos básicos, hasta 432. El tipo de interés del bono a 10 años volvió a superar el 6%.

Entre los expertos cunde la sensación, quizás más que nunca, de que se han sentado las bases para iniciar una recuperación y la salida a la crisis. El BCE ha mostrado su disposición de comprar deuda a corto plazo de España e Italia -siempre y cuando los Gobiernos soliciten ayuda-; el Constitucional alemán ha autorizado la puesta en marcha del MEDE y la Reserva Federal ha lanzado un QE3 (quantitative easing). Son pasos en firme que los mercados han valorado positivamente.

A partir de este momento, de lo que se está más pendiente es del rescate a España. Las posturas en el propio Gobierno parecen enfrentadas. Mariano Rajoy prefiere esperar a ver cómo evoluciona la economía, mientras que el ministro de Economía, Luis de Guindos, parece ser más partidario de pedir ya la ayuda. En esta misma línea se mostró ayer Joaquín Almunia, vicepresidente de la Comisión Europea, que advirtió al Ejecutivo del riesgo que suponen las incertidumbres.

Los expertos aseguran que la evolución de la prima de riesgo y de la Bolsa estará muy vinculada las próximas sesiones a las decisiones que se tomen al respecto. Pero sobre la mesa hay otros temas que preocupan, como la situación de Grecia o el conflicto chino-japonés. "Nos quedamos con este tiempo muerto mientras resolvemos todo este sudoku. Pero, ¿de qué tiempo hablamos mientras encontramos la piedra filosofal que nos permita combinar la reducción del déficit, fomentar el crecimiento (sin reformas… las reformas siempre tienen costes) y mejorar las condiciones de financiación de forma indefinida? Meses, creo. Compren entonces. Pero vigilen los imponderables. Oriente Medio y el mar de China entre ellos", explicaba ayer José Luis Martínez, de Citi.

Los expertos también están pendientes de Moody's, que hace meses puso la perspectiva de la deuda soberana española en negativa y deberá pronunciarse sobre la misma a finales de septiembre. En caso de que decida degradarla, el rating perdería el grado de inversión. JP Morgan dijo ayer que posiblemente sea el momento en el Gobierno decida pedir el rescate.

ArcelorMittal (-3,7%) fue el valor que más cayó. El sector eléctrico reaccionó de forma muy desigual a la reforma del sector. Red Eléctrica subió el 3,04% y Endesa bajó el 1,70%. Empresas de energías renovables como Solaria y Fersa subieron el 34% y 17%.

El S&P sube un 100% desde los mínimos de 2009

Wall Street ha sido uno de los factores positivos en el que se ha apoyado el mercado europeo en su último rebote. La decisión de la Reserva Federal de ejecutar un tercer programa de ayudas (quantitative easing) ha dado motivos de alegría para los inversores. El S&P se encuentra a unos 100 puntos del máximo histórico que alcanzó en octubre de 2007, y desde el mínimo de la crisis al que llegó en marzo de 2009 ha recuperado más del 100%.El euro continúa al alza ante la constatación de que su supervivencia ha pasado a ser incuestionable. Desde finales de julio la paridad sobre el dólar ha pasado de 1,206 a 1,312 a los que cotizó ayer. La divisa rompe así la primera resistencia técnica a la que se enfrentaba -los 1,31 dólares- y parece que su evolución apunta a que seguirá en la misma dirección. José Manuel Pazos, director de IGF, comenta que "tendremos que considerar la posibilidad durante un tiempo, de un dólar más débil, incluso aunque creamos que este tiempo será corto".