Helsinki insta a Madrid a evitar el rescate con más reformas
Rajoy se reúne con el presidente finlandés y elude hablar de contrapartidas a la ayuda porque no hay "ninguna decisión".
"No hemos tomado ninguna decisión hasta ahora, así que tendría poco sentido hablar de lo que puede ocurrir en el futuro", sostuvo ayer el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, sobre las condiciones que podrían acompañar a la petición de un rescate para el país. Su homólogo finlandés, que le visitó en Madrid, le instó a evitar la intervención aprobando más reformas.
En este sentido, el primer ministro de Finlandia, Jyrki Katainen, defendió que la desconfianza que los mercados están mostrando hacia España, traducidas en las altas cotas que ha experimentado la prima de riesgo española, no es "justa". Katainen, aliado habitual de la canciller alemana Angela Merkel en sus diagnósticos de austeridad contra la crisis, consideró que el Ejecutivo español está adoptando actuaciones "decididas", "muy positivas, muy difíciles de aplicar y muy fáciles de criticar", que no están siendo "valoradas de forma correcta" por parte de los inversores.
En cuanto a la posibilidad de que un rescate del país, apoyado por el Banco Central Europeo, libere a España de sus fantasmas, Katainen manifestó que lo ideal sería evitar la solicitud de esta intervención. El líder finlandés se mostró convencido de que el Ejecutivo sabrá "buscar métodos que eviten los nuevos paquetes de ayuda" y descartó la posibilidad de imponer nuevas condiciones al Gobierno de Rajoy más allá de "reducir el déficit" y aplicar "reformas estructurales para mejorar la competitividad".
Rajoy, por su parte, quiso dejar claro que España "no rehuirá sus responsabilidades ni se esconderá ante las dificultades" pero evitó hablar de las nuevas contrapartidas que podrían exigírsele al país si solicita formalmente el rescate, argumentando que aún no se ha decidido solicitarlo. De hacerlo, Bruselas podría imponer un calendario más férreo de reducción del gasto, si bien la troika suavizó ayer el de Portugal, ante las dificultades del país para seguir recortando, concediéndole un año más de plazo (hasta 2014) para lograr el 3% de déficit.
Rajoy aprovechó la visita de Katainen para reclamar "colaboración y solidaridad" al resto de socios europeos para salvaguardar al euro. Un paso clave, señaló, será elaborar "juntos" una "hoja de ruta" que permita avanzar "con determinación" en la unión bancaria y la unión fiscal, así como profundizar en la económica y política.