El Gobierno deja la puerta abierta para que Garoña siga operando
El ministerio de Industria ha aprobado hoy la revocación de la orden para que la central nuclear de Burgos cierre definitivamente su planta dentro de un año.
La central nuclear de Garoña (Burgos) seguirá funcionando en sus condiciones actuales a partir del 6 de julio de 2013. Según la disposición publicada hoy en el Boletín Oficial del Estado (BOE), el Ministerio de Industria autoriza a Garoña a continuar su actividad porque considera que cumple con los requisitos de seguridad impuestos en 2009. Nuclenor (propietaria de la central) necesitará tramitar antes del 6 de septiembre la autorización para continuar su actividad hasta 2019, seis años más de lo previsto.
Garoña (participada al 50% por Iberdrola y Endesa) presentó en 2006 una solicitud de renovación de la autorización de explotación pero, en 2009, el gobierno le exigió unas inversiones millonarias en seguridad para concedérsela. Tras un informe del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) fechado el 17 de febrero de este año, el gobierno valora que Garoña cumple con las condiciones de seguiridad establecidas. El BOE afirma que el CSN "requirió al titular [de Garoña], mediante Instrucciones Técnicas Complementarias, la realización de las pruebas de resistencia acordadas en el contexto de la Unión Europea, tras el accidente de la central nuclear de Fukushima, al igual que al resto de las centrales nucleares españolas, y que éstas no han identificado debilidades relevantes que requieran medidas urgentes desde el punto de vista de la seguridad".
El Ministerio alega que España tiene demasiada dependencia energética del exterior, por lo que no se puede permitir cerrar la central de Garoña y recuerda que "durante el año 2011, la electricidad de origen nuclear cubrió el 20 % de la demanda eléctrica en España".
Nuclenor continuará manteniendo la central "en las mejores condiciones de seguridad y, a la vez, trabajando en las actividades y proyectos relacionados con la continuidad", según ha declarado su director, José Ramón Torralbo, a la agencia Europa Press . "La orden ministerial modificada es una oportunidad de focalizar todos los esfuerzos y las energías de la empresa en la misma dirección: la fiabilidad de la planta", ha añadido.
Greenpeace alarma de las similitudes con Fukushima
Garoña fue inaugurada en 1970 y es la central más antigua de España. Funciona con un sistema nuclear de producción de vapor formado por un reactor de agua ligera en ebullición, como otras 20 centrales en todo el mundo, entre ellas, la japonesa Fukushima que, en marzo de 2011 provocó el peor accidente nuclear desde Chernóbil (Ucrania), en 1986. La ONG ecologista Greenpeace, que encabeza las protestas en favor del cierre de Garoña y recurrirá la decisión de alargar su vida, subraya que este modelo de central nuclear es especialmente frágil ante terremotos o inundaciones. Su responsable de campaña antinuclear, Raquel Montón, denuncia en un comunicado difundido en su página web, que Garoña no tiene suficiente protección para evitar una fuga de agua de sus piscinas contaminadas ni un plan de evacuación para reaccionar ante un posible accidente nuclear.A.T.