Se esperaba con interés la primera aparición de José Luis Rodríguez Zapatero desde que abandonó la presidencia del Gobierno en noviembre pasado, pero lo cierto es que el formato elegido y la compañía han sorprendido a propios y extraños. Pocos apostaban a que el retorno del expresidente al debate político iba a venir de la mano de un cara a cara con el cardenal Antonio Cañizares. Entre los más sorprendidos figuran al parecer sus propios compañeros del PSOE, algunos de los cuales no aciertan a comprender el sentido del acto. "Se ha tenido una fe excesiva en el sector financiero para garantizar el crecimiento, el desarrollo y el bienestar", dijo Zapatero. "Los fundadores de la Unión Europea no querían una Europa de los mercaderes, solo de relaciones económicas", contestó el cardenal.
La city