El fin de obra del metro de Málaga, pendiente de los recortes en la Junta
El metro de Málaga, obra estrella en Andalucía, pasa por un momento de incertidumbre. Falta parte de la financiación comprometida por la Administración autonómica, afectada por un duro recorte presupuestario, y el Banco Europeo de Inversiones (BEI) se plantea congelar su apoyo hasta conocer los planes de la Junta. La infraestructura precisa unos 174 millones para ser finalizada.
El proyecto de las dos primeras líneas del metro de Málaga nota el tijeretazo en los presupuestos de la Junta de Andalucía. El segundo suburbano de la Comunidad, tras el metro de Sevilla, está en un 80% de ejecución total y sufre sus primeras tensiones financieras.
La obra está presupuestada en unos 500 millones, de los que han sido desembolsados ya 326 millones. Los 174 millones restantes deben partir del BEI (104 millones) y de la Junta de Andalucía (70 millones), que trata de repartir entre sus consejerías el reciente tijeretazo de 2.770 millones en sus presupuestos de 2012.
Metro de Málaga está participada por Globalvía (25%), Cajamar (18%), Azvi (12%), Comsa (10%), Sando (9%), Vera (1%) y el 25% restante es de la entidad pública Giasa. Este conglomerado se hizo en 2004 con la construcción y concesión del suburbano por 35 años. Desde entonces los accionistas han puesto en juego 133 millones en recursos propios y atendieron una ampliación de capital por 40 millones en 2010, cuando se renovó la financiación con el BEI.
El Banco Europeo de Inversiones soporta el 60% del coste del proyecto
A pesar de que las obras continúan, con 1.700 trabajadores en el tajo y la intención de que el metro entre en operación en febrero de 2013, la Consejería de Fomento no ha podido explicar ni a la concesionaria ni al propio BEI cómo afecta el reajuste presupuestario a la obra. Estas dudas han puesto en guardia tanto a la empresa como al banco.
A esta situación se suma la ralentización de una segunda obra relacionada con la infraestructura, ejecutada por Ortiz. En este contexto, la Consejería espera que sean definidas sus partidas de inversión, mientras mantiene al metro malagueño como prioridad.
Este es uno de los mayores contratos de colaboración público-privada puesto en marcha en España. El BEI financia el 60%, siendo el jugador clave en su desarrollo, así como en el respaldo al plan de infraestructuras de la Junta.
Tras las últimas elecciones, la Consejería de Fomento está en manos de Elena Cortés, exconcejal de IU en Córdoba. En cuanto a Metro de Málaga, el representante de Giasa en el consejo es Antonio Tallón, director gerente de la Agencia de Obra Pública de la Junta.
14 trenes de CAF esperan en las cocheras
Metro de Málaga cuenta con 14 trenes, adquiridos a CAF, aparcados en las cocheras a la espera de que la infraestructura entre en funcionamiento.El estudio de tráfico, realizado antes de que estallara la crisis, prevé una demanda de 16 millones de usuarios al año.La concesionaria basa sus expectativas de ingresos en una tarifa técnica. Esta fija 1,94 euros del año 2004 por pasajero. De esa cifra, 0,72 euros son aportados por el pasajero y el resto lo pone la Junta de Andalucía.La longitud total de las dos líneas es de 14 kilómetros, con una veintena de estaciones prácticamente ejecutadas en su totalidad.Los trabajos de instalación de la catenaria en la Línea 1 (entre Andalucía Tech y La Malagueta) han finalizado ya en el tramo en superficie -3 kilómetros-. La implantación continúa ahora en el resto del trazado subterráneo.
La cifra
174millones es lo que resta por aportar al proyecto del metro de Málaga. 104 millones deben partir del BEI y 70 millones de la Junta de Andalucía.