Ibex, aterriza como puedas
Un autentico infierno ayer desatado sobre el cielo del Campeador. Tras alcanzar techo de combate rápidamente y soltar los primeros misiles, la escuadrilla de bombarderos Intruders fue localizada y abatida por una extensa y camuflada batería de antiaéreos.
Difícil, muy difícil asimilar lo acaecido ayer en el Campeador. Ayer les comenté que la Bolsa puede cambiar en minutos y quien manda es el cierre con la vela que traza sobre el gráfico. No podía ni imaginar lo acertado del comentario tras ver el final de la sesión añado, los mercados no dejan de dar lecciones nunca. Un piloto anónimo de la 2ª Guerra Mundial decía que cualquier día y en cualquier circunstancia, prefería ser un piloto con suerte que un buen piloto. La escuadrilla de A6 Intruders no tuvo suerte en la misión del lunes, una vez iniciada la Operación Rescate el fin de semana para nuestro país y sus entidades financieras.
Después de las esperanzadoras velas Gemelas semanales, sugiriendo el despegue de los bombarderos alcistas tras el buen cierre del viernes, se iniciaba la ascensión con un vertiginoso hueco alcista de más del +5%. Los Intruders superaban la primera resistencia en el Campeador nada más iniciarse la sesión, los 6.800 puntos. En pocos minutos la escuadrilla buscaba los 7.000 puntos. Se alcanzaba un máximo en los 6.940 puntos y la subida cercana al +6%. La banca subió con mucha fuerza. El ataque aéreo pareció uno de esos gloriosos días para los alcistas. Pensé en aquel lunes, 10 de mayo del año 2010, tras un fin de semana de largas reuniones de los mandatarios políticos de los principales países, y se creaba el primer fondo de rescate. El Campeador subió más de un 14% en aquella ocasión. Pero ayer algo fallaba. La escuadrilla de Intruders en el Emperador europeo no podía superar la resistencia de los 2.200 puntos. La prima de riesgo volvía a subir con fuerza.
Fue la media móvil de las 50 sesiones la que paró en seco el vuelo de los Intruders en el selectivo español. Después, los bajistas sacaban las baterías antiaéreas con misiles guiados con la precisión láser. Los bombarderos eran alcanzados y perdían altura de manera sistemática, de cien en cien puntos. 6.800, 6.700, 6.600... Todo empezaba a ponerse en duda. ¿Que había fallado en la Operación Rescate?. Surgían las primeras discrepancias en la forma de encauzar el rescate. Algo extraño ocurría en el César italiano, a las doce del medio día toda la escuadrilla era abatida y cerraba el hueco alcista de apertura. Empezaban los números rojos en el Mibtel.
El mercado colocaba en la diana el siguiente país en el que no confía. Pasadas las cinco de la tarde, el Campeador cerraba el hueco alcista de apertura y se colocaba en negativo. El éxito de las defensas antiaéreas bajista fue total. Los pocos Intruders que llegaban a tierra en el selectivo español, aterrizaban como podían. A cierre el Campeador cedía un -0,54% hasta los 6.516 puntos. Ver para creer, la fuerte subida se había diluido. Deja trazado un asesino reserval sobre la media móvil de las 50 sesiones, no augurando nada bueno para las próximas sesiones. El volumen de negociación aumentó considerablemente.
Tras el fracaso de la misión Intruder, habrá que observar la reacción de los bajistas y si los inician la ofensiva hacia los 6.300 puntos, para posteriormente atacar de nuevo los mínimos por debajo de los 6.000 puntos. El extenso reversal bajista, con el hueco de ayer cerrado es un aviso. Pero eso debe dibujarlo el gráfico.
En el Emperador europeo, la vela trazada es un largo y peligroso martillo invertido, quedó situado sobre la media móvil de las 20 sesiones en los 2.137 puntos. Se dejó un -0,29%. La resistencia de los 2.200 puntos funcionó a la perfección. Las bajistas no cedieron el 61,80% de retroceso Fibonacci. Buscarán con mucha probabilidad los 2.100/095 puntos y en caso de conquistarlos, los mínimos estarán rápidamente en el punto de mira de los osos.
El resto de selectivos de nuestro continente cerraron en negativo a excepción del Káiser. Los bajistas no consiguieron cerrar el hueco de apertura en el selectivo germano y terminó la sesión con una ligera subida del +0,17% hasta los 6.141 puntos. La directriz acelerada que traza su caída, frenó ayer el ataque de los toros, tras conseguir romper al alza durante la sesión las medias móviles de las 20 y 200 sesiones, que siguen camino de cruzarse a la baja. El índice alemán quedó situado sobre la parte inferior del canal bajista que dibuja desde máximos. La vela trazada no sugiere nada positivo tampoco.
El más afectado en Europa, el César italiano con un descenso del -2,79% hasta los 13.070 puntos. Vuelve a perder los mínimos del otoño pasado y la media móvil de las 20 sesiones. El general De Gaulle francés se dejaba un 0,29% hasta los 3.042 puntos. Dejaba su vela por encima de la media móvil de las 20 sesiones. Por su parte el Gentleman inglés quedaba prácticamente plano, cedía un escaso -0,05% hasta los 5.432 puntos y dibujaba un doji de larga sombra que hizo máximos sobre los 5.536 puntos, zona muy cercana a la media móvil de las 200 sesiones.
En cuanto a los selectivos de Wally, los descensos fueron más acusados que en nuestro continente. El general Custer tras alcanzar en la apertura los 1.335 puntos, no podía con la resistencia y rápidamente se venía abajo, para finalizar la sesión sobre los 1.308 puntos, cedió un -1,26%. Perdió además la media móvil de las 20 sesiones. Si se dejan atrás nuevamente los 1.300/290 puntos, los bajistas podrían iniciar una nueva ofensiva en busca esta vez, de los 1.250 puntos.
En cuanto al mundo de la tecnología, el Nasdaq Composite caía con más fuerza que su homóloga de parqué, el descenso fue un abultado -1,70% hasta los 2.809 puntos. Los últimos máximos alcanzados sobre los 2.882 puntos, nada más empezar la sesión, frenaron a los alcistas que terminaron cediendo la media móvil de las 20 sesiones. La vela una poderosa envolvente bajista. Muy atentos habrá que estar al hueco abierto entre los 2.796 y los 2.778 puntos. Cerrarlo daría alas a los bajistas.
Tras el fallo alcista de ayer en los principales selectivos de la renta variable, gana enteros la idea que nos dejaba el escaso volumen de negociación. Está subida no parece ser la buena y podríamos ver nuevos mínimos antes de que eso suceda. Veremos si los alcistas consiguen recomponerse después del duro golpe recibido ayer. De momento confiar en los toros tras de las velas trazadas es misión de valientes.