Deoleo destinará 20 millones a promoción en China y Brasil
El consejero delegado de Deoleo, Jaime Carbó, anunció ayer que la compañía aceitera va a invertir 20 millones de euros en promover el consumo de sus marcas de aceite en mercados emergentes, donde el margen es mayor, y no en España, donde el mercado está muy consolidado y no se consumirán mayores cantidades.
El grupo celebró ayer su junta anual de accionistas que estuvo presidida por âscar Fanjul, quien resaltó que Deoleo ha superado una etapa en la que estuvo "al borde del abismo", lo que "afectó a su reputación". Fanjul explicó que Deoleo debe centrarse en productos de valor añadido.
Por su parte, Jaime Carbó subrayó ante los accionistas que la empresa ha dejado atrás una "etapa de sombras que nunca debió vivir, cuando se abordaron operaciones insostenibles y se hicieron promesas que no se podían cumplir, lo que sumado a una gestión irregular de los anteriores gestores los hermanos Salazar, se puso en riesgo a la compañía".
Carbó ha resaltado que "hoy, con la seguridad de haberlo dejado atrás, se puede decir que corrimos el peligro de haber perdido todo el negocio". A su juicio, ahora es momento de centrarse en mercados más rentables, buscando márgenes sobre ventas, como China y Brasil, donde las marcas de la compañía crecen a ritmos del 58% y 18% respectivamente.
La junta aprobó una agrupación de acciones (contrasplit) por la que por cada 10 acciones antiguas de 0,5 euros de nominal se recibirá una nueva de 5 euros, y cuyo objetivo es facilitar que el precio de la sociedad en Bolsa se fije de forma adecuada y evitar movimientos bruscos de la acción. También ratificó una autorización para remunerar mediante la entrega de acciones de la sociedad a empleados y directivos del grupo, incluidos altos directivos y el consejero delegado, hasta un máximo de 12.000 euros por persona.
Otro 'no' a Salazar
Los accionistas de Deoleo rechazaron ayer las propuestas de Jesús Salazar, acusado de presunta estafa durante su gestión. Su representante propuso cesar del consejo a Antonio Hernández Callejas (presidente de Ebro) y Jaime Carbó por conflicto de intereses.