Aguirre acusa a Montoro de la polémica con los números rojos de Madrid
La presidente de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, se despachó a gusto ayer contra el Ministerio de Hacienda a raíz de la polémica originada por el inesperado incremento del déficit madrileño de 2011 respecto a los datos provisionales entregados en febrero.
Aguirre aseguró que, "como todos los años", la Consejería de Hacienda entregó los datos de déficit al Gobierno central "en un papel que lleva bien claro en el membrete la palabra provisional". Y añadió: "Por alguna razón que desconozco, el ministerio la dio por definitiva en febrero". Sin embargo, los datos de déficit que se dan a conocer a principios de un ejercicio nunca son definitivos y nunca lo han sido. De hecho, el documento que publicó el Ejecutivo central indicaba que los números rojos por comunidades eran "estimaciones".
El problema es que, en el caso de Madrid, la diferencia entre los datos provisionales y los definitivos son abismales. En febrero se informó de que el déficit de la comunidad en 2011 fue del 1,13% del PIB y el pasado 18 de mayo se conoció que el dato real era el 2,2%. Ello supone 2.000 millones más e implica que también la región presidida por Esperanza Aguirre incumplió el objetivo de estabilidad.
La Comunidad de Madrid argumenta que la caída de ingresos en la última parte del año fue mayor de la prevista y señalan que el plan de pago a proveedores también supuso elevar el capítulo de gastos del ejercicio 2011. La Comunidad Valenciana y, en menor medida, Castilla y León, sufrieron el mismo problema.
Menos sueldo
Esperanza Aguirre, en un acto organizado por el diario La Razón, aseguró ayer que se bajará más su sueldo y no descartó reducirlo también a los funcionarios autonómicos. Además, se opuso a la propuesta de cobrar el IBI a la Iglesia que defiende el PSOE.