Gallardo logra refinanciar a cuatro años toda su deuda
El acuerdo con una veintena de entidades permitirá al grupo industrial mantener todas sus áreas de negocio
Tras casi un año de negociaciones con la banca acreedora (un total de 19 entidades), el grupo industrial Gallardo ha logrado, finalmente, llegar a un acuerdo para refinanciar su deuda millonaria, que asciende a los 500-600 millones de euros.
Según informó ayer el grupo, el pacto permitirá refinanciar la totalidad de su deuda por un periodo de cuatro años, lo que asegura el mantenimiento de todas sus divisiones de negocio, así como "un mayor nivel de confianza y solidez para afrontar la actual coyuntura económica".
Desde la empresa no quisieron facilitar el montante de su deuda. Según las cuentas de 2009 (las últimas consolidadas que ha presentado Gallardo), sus deudas a largo plazo a finales de ese ejercicio eran de 1.146,7 millones de euros, de las que 977,4 millones se correspondía con deudas con entidades de crédito.
El año pasado el grupo puso en venta seis de sus plantas, con las que pretendía ingresar unos 1.095 millones, lo que facilitaría el acuerdo con la banca acreedora. Sin embargo, la desinversión principal (la venta de cuatro fábricas al grupo brasileño CSN) se fue al traste y, con ella, la posibilidad de recibir unos 970 millones.
A principios de este año, y tras una nueva negociación capitaneada por el propio Alfonso Gallardo, el grupo consiguió vender su fábrica de Turingia (Alemania) a la siderúrgica brasileña por 485 millones, lo que ha servido para aliviar algo la situación financiera y facilitar el acuerdo con los bancos. Una venta que, a la larga, no será beneficiosa para el grupo, ya que la planta alemana tenía una gran capacidad de generar caja y era la única que mantenía en un mercado en el que ya se ha empezado a recuperar la demanda.
El grupo engordó su deuda, sobre todo, a raíz de la compra de la fábrica germana y de la decisión de ampliar Siderúrgica Balboa.
El 29 de diciembre de 2009 el grupo reestructuró la deuda con el sindicato de bancos acreedor, para lo que firmó un contrato de financiación a largo plazo por un importe máximo de 527,2 millones de euros. Del total, 209,4 millones eran necesarios para atender necesidades de circulante del grupo y 237,4 millones para las inversiones en Siderúrgica Balboa. A finales de 2010 el grupo tuvo que solicitar también un crédito puente.
Los problemas del último año han provocado la salida del grupo de Juan Sillero, mano derecha de Gallardo en los últimos 25 años, y de otros directivos clave.