Mittal viste de gala el icono de Londres 2012
"Para mí es un gran orgullo ver terminado el ArcelorMittal Orbit no ya sólo como una obra de arte completa, sino también como un símbolo material del espíritu olímpico". La satisfacción de Lakshmi Mittal, el todopoderoso magnate del acero, el pasado viernes era evidente. Tras más de un año de trabajos se daba por terminado el que será uno de iconos de los Juegos Olímpicos de Londres y el que quiere convertirse en uno de los monumentos emblemáticos de la capital británica.
El Orbit es una torre tubular de 114,5 metros de altura (22 metros más que la Estatua de la Libertad) que cuenta con dos miradores de 300 metros cuadrados que ya son el punto más alto para poder contemplar el skyline londinense.
El monumento ha sido financiado en su mayor parte por ArcelorMittal, que ha aportado 19,6 millones de libras (24,4 millones de euros), mientras que los restantes 3,1 millones de libras (3,8 millones de euros) han corrido a cargo de las arcas municipales de Londres.
Para el alcalde de la ciudad, Boris Johnson, la torre servirá para atraer inversión al este de Londres, una de las zonas menos prósperas de la capital británica y donde se ha levantado el gigantesco Parque Olímpico Queen Elisabeth. "Es un símbolo de prosperidad y crecimiento que lanza el mensaje [...] de que esta parte de Londres se ha abierto a los negocios tras décadas de abandono", apunta Johnson.
Apuesta personal
El Orbit es una apuesta personal del alcalde de Londres, que, en 2009, aprovechó un encuentro casual con Mittal en el guardarropa de la cumbre de Davos para pedirle que su grupo formara parte de los patrocinadores olímpicos y colaborara en el éxito de la cita deportiva.
Para el presidente de ArcelorMittal, el hombre más rico del país, ha sido la oportunidad de hacer algo por la ciudad en la que vive desde hace 15 años. "Es un gran honor y un privilegio para el grupo haberse involucrado en este proyecto", señala Nicola Davidson, máxima responsable de comunicación de la compañía.
En la construcción de la torre se han empleado 2.000 toneladas de acero que se ha intentado que procedan de todas las plantas de ArcelorMittal en el mundo. "Algo simbólico", añade Davidson. No obstante, la mayor parte del material ha salido de factorías del grupo en Europa occidental, como la que tiene en Sestao (Vizcaya).
Para Cecil Balmond, el arquitecto responsable del monumento junto al premiado artista Anish Kapoor, el acero era el material "lógico" para un proyecto de este tipo. "No podía ser otro", asegura, aunque admite que, muy al principio, se barajó el cemento. "Ahora se ha diseñado para que dure toda una vida", apostilla.
"Queríamos algo que fuera audaz, artístico, progresivo", explica Ian Louden, director de marca de ArcelorMittal. No obstante, Louden reconoce que una apuesta de este tipo genera "división de opiniones", como así ha sido. A una buena parte de los londinenses ni les gusta la torre ni les hace mucha gracia el desembolso de fondos públicos que ha supuesto. Louden recuerda que, en su momento, sucedió algo similar con otros monumentos que ahora son admirados, como la Torre Eiffel en París o el propio Parlamento británico en Londres.
Los planes de las autoridades londinenses pasan por que el Orbit se convierta en una atracción turística de primer orden durante los Juegos Olímpicos y que se mantenga en el tiempo, como ha sucedido con el London Eye, la gigantesca noria a orillas del Támesis. Balfour Beatty, la empresa que gestionará la torre, prevé un millón de visitantes en su primer año de funcionamiento y unos ingresos cercanos a los 10 millones de libras (12,4 millones de euros), entre entradas, tienda de recuerdos y alquiler de los miradores para eventos.
Durante la competición, subir al monumento costará 15 libras para los adultos y 7 libras para los niños (18,5 y 8,7 euros, respectivamente). La torre (situada en la zona sur del Parque Olímpico, junto al gran estadio de atletismo) tendrá un espectáculo de luces de 15 minutos, todas las noches durante los Juegos. Cuando éstos acaben, permanecerá cerrada mientras se habilita todo el Parque Olímpico para su uso habitual. La parte norte del parque reabrirá en julio del año que viene, principalmente como una gran zona verde. La sur volverá a poder disfrutarse a partir de marzo de 2014, incluido el Orbit. "Siempre permanecerá en Londres", concluye Lakshmi Mittal.