La crisis no aumenta los suicidios en España
La crisis económica ha provocado también un repunte de la tasa de suicidio. Países como Irlanda, Grecia o Italia, se llevan la peor parte de este incremento. España, sin embargo, ve descender esta tasa desde 2007.
Desde que la crisis estallara en el verano de 2007, cada vez más pequeños empresarios se han quitado la vida por un fenómeno conocido en Europa como "suicidio por crisis económica". Los países más afectados por este repunte han sido Grecia, Italia e Irlanda.
En el caso de Grecia, la tasa de suicidios entre varones se elevó un 24% de 2007 a 2009, según estadísticas gubernamentales. En el mismo periodo, la tasa aumentó un 16% en Irlanda y un 52% en Italia. El Heraldo.co cuenta que en Irlanda los terapeutas llaman a este fenómeno la depresión del Tigre Celta, ya que desde 2008 se produjo una gran afluencia de pacientes masculinos de mediana edad aquejados de insomnio y falta de apetito como consecuencia del desplome del mercado inmobiliario del país. Cuando la Fundación Nacional para la Investigación del Suicidio de Cork entrevistó a parientes de las víctimas, se supo que muchos de ellos estaban desempleados.
España, sin embargo, ha visto descender esta cifra, desde los 3.263 suicidios que hubo en 2007 hasta los 3.158 de 2010, según el último informe sobre defunciones según la causa de la muerte publicados hoy. De los 3.263 suicidios de 2007, 2.463 eran hombres y 800 mujeres. En 2010, de 3.158, 2.468 eran hombres y 690 mujeres. Si bien no se conoce el número exacto de estos suicidios que tienen relación con la crisis, el descenso de la cifra es una buena noticia si se compara con otros países, como Grecia.
El país heleno registró en el primer semestre de 2010 un aumento del 40% en los suicidios, a pesar de que hasta entonces era uno de los lugares con la tasa más baja del mundo, el 2,8% cada 100.000 habitantes. Desde que la crisis se recrudeciera en 2010, los medios griegos informan de suicidios casi a diario. En Italia también se produce una media de un suicidio diario provocado por la crisis, según Eures, la red para facilitar la movilidad laboral de la Comisión Europea.
Otros países europeos, como Suecia o Finlandia, han conseguido sin embargo evitar un repunte de este tipo en épocas de crisis gracias a la puesta en marcha de proyectos dirigidos a reactivar el mercado laboral y poner a la gente nuevamente en pie, en lugar de dar ayudas económicas.