España sufre la peor fuga de capitales desde que se recrudeció la crisis
El nivel de desconfianza se agrava. Los inversores españoles se llevaron al extranjero 13.000 millones de euros en febrero, según el Banco de España. Es la mayor fuga de capitales nacionales desde que estalló la crisis de la deuda.
La prima de riesgo no sube porque sí, sube porque cada vez hay menos dinero procedente del exterior -y también del interior- dispuesto a apostar por España. Los denodados esfuerzos del Gobierno por tranquilizar a los mercados con reiterados anuncios de reformas y recortes caen en saco roto. No en vano, la prima de riesgo española continúa por las nubes -hoy en el entorno de los 420 puntos básicos-, cuando a comienzos de año apenas superaba los 300.
Los extranjeros llevaban sacando dinero de España desde hace meses, lo que ha disparado la prima de riesgo. La mala noticia es que los últimos datos revelan que también los españoles se suman con fuerza a esta tendencia. Por primera vez desde febrero del año pasado, los ahorradores nacionales desinvirtieron en deuda pública y acciones, al llevarse 2.177 millones a otros países. También vaciaron sus depósitos y otros instrumentos del mercado interbancario -como repos- para mandarlos fuera: transfirieron 11.349 millones.
En total, la fuga de capitales españoles del pasado febrero alcanzó los 13.526 millones, según los datos de la balanza de pagos publicada hoy por el Banco de España. Es la peor cifra desde que se recrudeció la crisis, con el estallido de los problemas con la deuda pública europea, en el verano de 2010. Entonces, la rentabilidad de la deuda española se disparó y el aprovisionamiento de liquidez por parte de las entidades financieras nacionales entró en serio peligro.
La serie histórica recogida por el organismo que dirige Miguel Ángel Fernández Ordóñez no incluye una cifra tan abultada. Le van a la zaga, eso sí, las de mayo del año pasado (11.614 millones de salida entre deuda pública, acciones, depósitos y repos), y de octubre de 2010 (10.192 millones). En los últimos 17 meses hasta febrero, la salida acumulada de capital español hacia el extranjero ha superado en términos netos los 13.000 millones de euros, equivalentes al 1,2% del Producto Interior Bruto (PIB) español de 2011.
Los extranjeros huyen
El saldo de los inversores nacionales fue negativo en febrero, pero el de los extranjeros fue todavía peor, pues continuaron sacando dinero a carretadas de España. En febrero, 17.000 millones y los últimos 12 meses, más de 113.000 millones, el 10,5% del PIB. Si se suma el dinero que se llevaron los inversores nacionales, la salida supera un escalofriante nivel de 28.000 millones.
Las inversiones de cartera de los extranjeros en España -de las que aproximadamente el 80% es deuda pública y el 20%, acciones- se redujeron en febrero en 3.884 millones de euros, mientras que el apartado denominado "otras inversiones" -que incluye depósitos, repos y préstamos- arrojó una disminución de 13.460 millones.
La buena noticia -la cursiva no es casual- está en que, aunque los capitales extranjeros todavía no han comenzado a retornar, sí se aprecia un freno en la profunda tendencia de los últimos meses. Así, en enero se fueron 5.047 millones en inversiones de cartera y 4.667 en instrumentos del mercado monetario. En diciembre fueron 15.152 y 19.390, respectivamente, y en noviembre 2.603 y 16.675.