Un fármaco contra el sobrepeso para comerse el mercado
El medicamento Qnexa contra la obesidad está a punto de ser aprobado por EE UU. Los médicos se mantienen a la expectativa sobre su eficacia.
Tenemos una carencia absoluta de fármacos contra la obesidad". Es el panorama que explica el doctor Felipe Casanueva, jefe de Endocrinología y Nutrición del Hospital Clínico de Santiago. "Y cualquiera que llegue lo hará en un momento muy importante, ya que los médicos nos vemos ante una epidemia de obesidad en el mundo como nunca antes se ha dado".
En este contexto puede llegar a las farmacias el medicamento Qnexa, desarrollado por la compañía californiana Vivus, al que los médicos miran con expectativas pues ha demostrado mayor efectividad que los escasos fármacos que actualmente se comercializan.
"Se ha demostrado muy eficaz. Como media, en seis meses, se pierden cinco kilos más que el grupo tratado con placebo", explica Casanueva. "Hay una gran demanda de este tipo de medicamentos y en cuanto se muestren más eficaces que el placebo será mejor, porque no hay casi nada en el mercado", asegura Juan del Arco, director técnico del Colegio de Farmacéuticos de Vizcaya. "Es bastante efectivo si se asocia a una dieta y ejercicio. Disminuye un 30% la grasa que se consume", asegura.
Pero Qnexa todavía tiene que superar una barrera. En 2010, la FDA (agencia del medicamento de EE UU) rechazó su comercialización y pidió nuevos informes para analizar posibles efectos adversos en personas con problemas cardiovasculares o con adicciones. En febrero, un panel de expertos de la FDA aprobó por 20 votos a favor y 2 en contra seguir con la comercialización, por lo que Vivus espera que el 17 de julio se dé el visto bueno definitivo, lo que podría llevar el medicamento a las farmacias antes de que finalice el año.
En juego hay una ayuda para los endocrinos y, también, un gran pastel de dólares que comerse. Solo en España, el mercado de fármacos para adelgazar (con receta) fue de 29,4 millones de euros, según la consultora IMS Health. Entre ellos, Alli, Xenical o Lipograsil. "La demanda existe", confirma Arco, "con muchos intereses de la industria farmacéutica para ganar la partida".
"Qnexa, en verdad, aporta bastante poco de nuevo", comenta este experto. En realidad agrega una combinación de dos principios activos ya existentes, el topiramato (de efectos anticonvulsionantes y utilizado contra la epilepsia) y la fentermina, de efecto anfetamínico y saciante.
La combinación de ambas drogas afecta al sistema nervioso central, "inhibiendo en el cerebro el centro de la saciedad", explica Arco. "Es una forma de quitar el apetito y engañar a nuestro organismo", a diferencia de otros como Alli o el Xenical, que tienen una acción local en el intestino de absorción de grasa.
Los fármacos adelgazantes procedentes de las anfetaminas, que se utilizaban en los años sesenta y setenta, fueron retirados por sus efectos adversos. La fentermina pertenece a esa familia, pero dentro de una generación con menores consecuencias no deseadas.
"El futuro para tratar la obesidad vendrá de este tipo de combinación de fármacos como en otras enfermedades", asegura Albert Lecube, coordinador del grupo de trabajo sobre obesidad de la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición. "Creo que Qnexa es una novedad en sí misma porque no hay otros fármacos", afirma.
Lecube cree que será un buen instrumento para pacientes con obesidad. Aunque también para otros con sobrepeso y riesgo de enfermedades asociadas como la diabetes, el colesterol o la hipertensión. Sobre los efectos adversos, apunta a que debe ser el médico quien ponga "en la balanza de riesgos y beneficios" a cada paciente, y que siempre se prescriba el Qnexa con receta. "Hay que explicar los riesgos porque la gente hace cualquier cosa para adelgazar".
Las cifras
23% de la población española tiene problemas de obesidad.29,4 millones de euros fue el gasto durante el último año en el mercado de fármacos con receta para adelgazar en España, según la consultora IMS Health.
Una respuesta en este trimestre para Europa
Vivus es una compañía biofarmacéutica californiana situada en pleno Silicon Valley, en Mountain View, junto a Google. Sus productos más cerca del mercado están destinados a luchar contra la obesidad, la apnea del sueño, la diabetes y la disfunción eréctil (con el fármaco Avanafil). Cotiza en Bolsa, con un capital de 1.800 millones de dólares.A las preguntas de este diario, un portavoz en EE UU señaló que la firma está en "periodo silencioso" hasta la aprobación del fármaco por parte de la FDA y redirigía a un documento descriptivo del producto ante las preguntas sobre los potenciales efectos adversos del Qnexa. Sí respondía que para Europa están preparando un informe para la Agencia del Medicamento comunitaria, que había solicitado información adicional. Esa respuesta llegará a lo largo del segundo trimestre de este año.Los expertos consultados señalan que una vez que se haya aprobado, se comprobará si existe algún efecto no detectado hasta ahora, ya que se probaría en un gran rango de población. "Más peligroso es no tratar a las personas obesas", cree el doctor Casanueva.