Los bajistas entran a matar en el Ibex
Sin rastro de bravura ayer de nuevo en los toros para plantar cara en el Campeador. Mientras, los osos se preparan para la estocada y alcanzan las cercanías de los 7.600 puntos. El fuerte volumen de negociación anuncia la suerte suprema en breve. En Europa la faena también se complica, se perdieron ayer los 2.400 puntos.
Imparables nuevamente los bajistas en nuestro selectivo, no hay forma de detener la ofensiva de los osos. Otra sesión de poderío y dominio absoluto del lado oscuro, esta vez también en las principales plazas bursátiles de la renta variable, aunque con diferente arte. Ayer la caída fue del -2,09% en el Campeador, le dejó situado en los 7.660 puntos. Ya estamos a escasa distancia del soporte clave, los 7.500/600 puntos. El hueco de los 7.858/7.778 ha sido perforado a cierre, nuevo varapalo para el bando alcista. Cuando estos gaps no funcionan como apoyo y se cierran completamente, son una clara señal bajista.
Después de la envolvente bajista que desarrolló el martes, nueva vela sólida y negra dibujada, con escasas sombras en sus extremos. Habrá que vigilar de cerca la vela de hoy y ver si deja algún tipo de pauta que nos indique respuesta del lado de los toros sobre estos niveles. Romper este tipo de zonas tan importantes a la primera no suele ser habitual, la sobreventa que trae acumulada el Campeador es muy elevada y puede jugar a favor de los alcistas.
Del lado de los bajistas, la fuerza que traen desde los 8.632 puntos y el alto volumen de negociación que se produjo en el descenso de ayer, mucho más alto del habitual. Llega la hora de la verdad. Si no reaccionan los toros en breve, se pueden encontrar con el estoque clavado en todo lo alto. Una tercera vela sólida y negra nos avisaría del éxito del volapié. Por el contrario, un martillo sería la señal de un pinchazo de los osos en la estocada.
Poco a poco se va confirmando la importancia de la extraña divergencia que mostraba el Campeador en solitario, frente a sus homólogas. No era un asunto como para tomarse a la ligera. Estas descorrelaciones tan fuertes, son una anomalía con las que el mercado avisa de que algo no funciona como debiera. Como ya les he comentado varias veces, la cuestión es, lo que para el resto de las Bolsas puede ser una corrección sana y necesaria, después de las importantes alzas acumuladas y tras alcanzar fuertes resistencias, para el Campeador puede ser un verdadero infierno y ver muy de cerca los 7.000 puntos. Las tres figuras de vuelta en forma de HCH que fuimos comentando desde mediados de febrero, no son como para estar tranquilos. La alerta por Tsunami que lanzamos el pasado día 29 tras romperse la clavicular del último gran HCH, poco a poco va haciéndose realidad.
En Europa, los osos ofrecieron una faena muy seria ayer. En algunos índices como el Káiser alemán, que mostraba una fortaleza envidiable, fue de los más sufrió el ataque bajista perpetrado en la sesión. Se dejó un -2,84% hasta los 6.784 puntos. Perdió la media móvil de las 20 y 50 sesiones. En cuanto al Emperador se dejó un -2,46% y perdió los 2.400 puntos ligeramente, rompiendo a la baja la figura de diamante que veníamos observando desde hace algún tiempo. Nuevos mínimos y un descenso en el que ya se pueden ver cinco impulsos a la baja, no son buenas sensaciones las que deja el gráfico del selectivo europeo para el final de esta semana. Perder los 2.385 puntos abriría las puertas a una corrección mucho más severa.
En Wally tampoco escaparon a las zarpas bajistas el día de ayer. El General Custer se dejó -1,02% y perdió ligeramente los 1.400 puntos, acabó la sesión en los 1.398 puntos sujetándose sobre la media móvil de las 20 sesiones. De momento no hay nuevos mínimos, sólo en caso de perder los 1.385 puntos los osos darían el primer toque de atención sobre el selectivo americano. La zona clave para los toros en el S&P está entre los 1.370/77 puntos. En ella encontramos la directriz alcista que le guía desde los 1.098 puntos y la media móvil de las 50 sesiones. Romper esos niveles en torno a los 1.370 puntos supondría la llegada de serios problemas para el General americano y una más que probable profunda corrección. La tecnología tampoco se libró ayer del castigo, el Nasdaq Composite cedió un -1,46% hasta los 3.068 puntos, soportándose también sobre la media móvil de las 20 sesiones. Mientras los 3.000 puntos se mantengan en pie, nada que nos haga dudar de la brillante tendencia alcista en el mundo del chip.
Veremos si hoy los alcistas consiguen detener a los osos en el Campeador o por el contrario inician definitivamente la estocada final a los 7.500 puntos. Feliz fin de semana a todos.