Judíos de Polonia, antes del armagedón
Las atrocidades cometidas por el ejército nazi durante la ocupación de Polonia forman ya parte fundamental de nuestra visión del siglo XX. Fotografías, grabaciones en blanco y negro e incluso recreaciones modernas, como la archiconocida Lista de Schindler, están inscritas en nuestras mentes como arquetipo del mal absoluto, certificado después en los campos de concentración.
Menos conocida es la vida normal de los judíos en Polonia antes de la infamia. De mostrarla se ocupa la exposición Y sigo viendo sus rostros. Fotografías de los judíos polacos, que han traído a Madrid el Centro Sefarad-Israel y el Instituto Polaco de Cultura. En ella se reproducen rostros y escenas de la vida cotidiana de la comunidad judía polaca en el período previo a la invasión del ejército alemán (septiembre de 1939), cuando las personas eran todavía tratadas como personas.
La muestra parte de una iniciativa de la Fundación Shalom, que en el año 1994 promovió la donación de fotografías que recrearan la vida en imágenes de la numerosa comunidad judía de Polonia. Fueron llegando paulatinamente, desde Polonia hasta los más alejados rincones del globo terráqueo, hasta sumar a día de hoy más de 9.000 imágenes que dan fe de una época.
Algunas decenas de ellas se expusieron por primera vez en Varsovia en 1996, y han pasado después por grandes capitales de todo el mundo, como Los Ángeles, París, Múnich, Jerusalén, San Petersburgo, Bruselas, Buenos Aires, México DF, Toronto, Nueva York o Londres. Ahora pueden verse en el Palacio de Cañete de Madrid (calle Mayor, 69).