"Será difícil prejubilar en las nuevas fusiones"
La sección financiera de UGT advierte que si las nuevas fusiones se saldan por vías traumáticas, generará conflictividad.
La reordenación de las cajas de ahorros se saldó por la vía mayoritaria de las prejubilaciones. Las cajas pagaron una media de 300.000 euros por cada una. La reforma laboral encarece esta vía y facilita despedir vía ERE, con un coste medio de 24.000 euros. José Miguel Villa (Madrid, 1955) secretario general de FES, la rama de servicios UGT, confía en que la nueva tanda de fusiones se salde por vías no traumáticas, pero advierte que si no es así la conflictividad podría llegar a la banca.
¿Cómo valoran la reforma financiera?
La reforma tiene una finalidad central que es forzar las fusiones y reducir el número de entidades. Aunque el Gobierno argumente que el objetivo es sanear los balances y reducir el precio de la vivienda, muy pocas personas pueden acceder ahora a un crédito. Comprará el que ya tiene dinero, para especular. Lo único seguro es que habrá fusiones, cierre de sucursales y pérdida de empleo.
¿Los ajustes de empleo serán como los que se han producido hasta ahora?
Las entidades que ya han hecho fusiones y se metan en otro proceso deberán adelgazar otra vez su plantilla. Ahora va a ser difícil utilizar la vía de las prejubilaciones, porque ya casi no queda gente mayor, por lo que podemos vernos abocados al ERE tradicionales.
¿Tienen estimado qué impacto tendrá en empleos?
No se puede calcular. No es lo mismo que se junten La Caixa y Bankia, a que Bankia se quede con una caja menor. En cualquier caso, al entrar la gran banca en el baile, puede disparar las cifras del ajuste. He oído hablar de un recorte de hasta 40.000 personas.
¿Cómo valora el nuevo proceso de concentración?
Habrá que ver si se cometerán los mismos fallos que en los anteriores. Caixa Catalunya, Novagalicia, Unnim, están en la ruina. En su día, los reguladores autorizaron estas fusiones porque tenían un plan de negocio pero antes de cumplirse un año las han intervenido. ¿Qué sentido tiene que un plan de saneamiento no dure ni un año?
¿Cómo influirá la reforma laboral?
Indudablemente podría influir de manera negativa, pero dependerá de la actitud que tome la patronal del sector. Hay compromisos para que los ajustes se hagan de forma no traumática.
¿Qué papel van a jugar los sindicatos en la reordenación?
Salvando el tema contractual, con los convenios de ahorro y banca. Al margen de que haya congelación salarial, los trabajadores tienen garantizado un marco laboral para los próximos años.
Los convenios ceden congelación salarial a cambio de salidas no traumáticas. ¿No puede quedar en papel mojado esa garantía?
No tiene por qué ser así. Se puede jugar con eso. La garantía está en convenio pero cuando el problema llega al caso específico, es razonable superar el convenio para reducir las salidas de personal.
El sector financiero ha afrontado sus ajustes de forma pacífica. ¿Aumentará ahora la conflictividad?
No ha habido conflictividad porque las condiciones han sido buenas. Los trabajadores estaban deseando apuntarse a los planes de prejubilación. Con 54 años, las perspectivas laborales son inexistentes, y una oferta para irte a casa con el 80% o el 90% del sueldo es muy atractiva. Es distinto a que ahora te digan que te vas a casa con 20 días de indemnización por año trabajado. La conflictividad, habrá que verla en cada caso.
¿Intentarán las entidades reducir los sueldos?
En algunos de los bancos constituidos por cajas ya lo están planteando, junto a nuevas medidas de reducción de empleo y eso, con absoluta seguridad, lo único que garantiza es una conflictividad en el sector porque los trabajadores ya han hecho demasiados sacrificios sin tener ninguna responsabilidad en la crisis. Los convenios ya establecen una moderación salarial suficiente y si no les basta solo encontrarán el conflicto.