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Análisis técnico

La jugada bajista en el Ibex, Nagare Boshi

Se destaparon las cartas en el Campeador y la jugada de momento, se la llevan los osos. Un martillo invertido en plena clavicular, vela potencialmente bajista, augura un ataque de los osos.

La jugada de los osos
La jugada de los ososChema Fandiño

Fue en el obstáculo de los 8.500 puntos, donde ayer los alcistas se rindieron en el camino de dificultados que les analizamos ayer. Inició la sesión con hueco alcista hasta la primera barrera que les comentamos ayer. Se había superado nada más empezar la sesión la directriz superior del canal bajista que viene dibujando el Campeador y la resistencia de los 8.400 puntos. Bien empezada la jornada para los alcistas, rotura con hueco de la primera zona de trabas que tenía por delante.

Rápidamente se superaba la gran envolvente bajista, el hueco entre los 8.423 y los 8.453 puntos y el 38,20% de retroceso Fibonacci desde máximo de los 8.967 puntos, en torno a las diez de la mañana ya estábamos en la clavicular sobre los 8.475/580 puntos. Todo hacia presagiar que los toros iban a tener su día. Después de una ligera consolidación sobre las once y media se atacaba la zona decisiva, los 8.500 puntos. Pero en los 8.499,60 puntos los bajistas empezaban a mostrar su jugada.

Empezaban a atacar con sigilo, poco a poco pero sin descanso hasta llevar al Campeador hasta los 8.343 puntos, donde después de varios intentos alcistas de recuperar los 8.360/50 puntos, sobre las cuatro de la tarde sucumbían ante un ya feroz ataque de los bajistas, que le llevaron hasta los niveles de apertura, para acabar cerrando la sesión en los 8.385 puntos, con un ligero ascenso del +0,10%. Los osos habían mostrado a las claras su jugada, un martillo invertido sobre los 8.500 puntos tras el fuerte rebote del martes. Este tipo de vela se conoce en chartismo como Estrella Fugaz, Nagare Boshi en japonés.

Este tipo de vela aparece al final de una tendencia alcista o de fuertes alzas, tiene un cuerpo real pequeño, su color puede ser blanco o negro siendo más significativa si es negro, como este caso y larga sombra en la parte superior, al menos tres veces de la longitud del cuerpo real de la vela. No suelen tener sombras en la parte inferior de la vela y si la tiene es muy pequeña. La psicología del movimiento para reconocer la Estrella Fugaz es calcada a la sesión de ayer.

Tras alcanzar un techo de mercado o resistencia abre con hueco al alza con respecto al día anterior, se inicia un rally alcista en la sesión marcando un máximo significativo, tras llegar a la zona de resistencia o techo de repente se detiene y empieza a bajar sin descanso hasta que el cierre que se produce cerca de la apertura o incluso un poco por debajo. Todos los inversores que entraron largos durante la sombra de la vela, ven con preocupación que el cierre ha sido por debajo. Si al día siguiente abre por dejando atrás el mínimo de la Estrella Fugaz, provocará el cierre de los posiciones largas que acentuarán más la caída.

Exactamente como se produjo la sesión de ayer, si además en la sesión de hoy se produce con un hueco a la baja, dejará un pequeña isla bajista que hará más fiable el movimiento a la baja. Tiene un claro ejemplo del potencial de este tipo de vela el día nueve de febrero de este año, cuando se alcanzaron los 8.967 puntos, los últimos máximos alcanzados. Después de aquella Estrella Fugaz el Campeador ha descendido desde allí hasta casi alcanzar los 8.000 puntos.

Este tipo de velas son de enorme fiabilidad por lo que un trader no puede pasar por alto este tipo de movimientos, que pueden llegar a ser de enorme rendimiento si se opera a la baja desde el principio. La operativa quedaría anulada si se supera la parte superior de la sombra de la Estrella Fugaz. Hoy tendremos la respuesta a la jugada de los osos, si los alcistas no consiguen hoy seguir al alza y se inicia el descenso podríamos ver de nuevo los 8.250 puntos, zona de origen de la envolvente alcista del martes o incluso los 8.160 puntos donde se detuvo el impulso bajista.

Como le señalé en anteriores análisis, tras formarse y confirmarse un HCH como el sucedido en el Campeador, puede producirse el llamado rebote del gato muerto, que puede alcanzar la clavicular de la figura del gran lobo para después volver a caer con fuerza. Junto a todo esto se suman a la jugada bajista de los osos, que la media móvil de las 20 sesiones hizo de barrera a la subida y que la primera subonda del impulso bajista no ha sido rebasada a cierre.

Con todos estos datos que nos ofrecen las velas, las probabilidades de seguir con el rebote son mínimas, cuando menos asistiremos a una nueva corrección a la baja que pueda desarrollar la idea de la quinta subonda a la baja con la que venimos especulando. De producirse un cierre por encima de los 8.500 puntos, los toros habrían un último comodín en su jugada para llevarse la mano, pero las velas no le acompañan. Veremos. Mucha precaución.

Para apoyar más la jugada de los osos, tenemos al Emperador europeo que dejó también otra Estrella Fugaz en plenos 2.600 puntos, la gran resistencia que le queda por superar. Ayer tras alcanzar los 2.593 puntos se desinfló hasta los 2.574 puntos, subiendo un +0,70%, pero dejando la siniestra vela sobre su gráfico. Si también observan la vela dejada el veintiocho de octubre, podrán ver el fuerte ataque bajista que producen los Estrellas Fugaces. En el Emperador europeo empieza a tomar cuerpo la idea que les comenté ayer de la figura de diamante que pueda estar desarrollando.

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