Aguirre liquida Aeropuertos de Madrid y aparca el proyecto de El Álamo
Esperanza Aguirre liquida la sociedad Aeropuertos de Madrid. Su proyecto estrella de la pasada legislatura, la construcción del aeródromo privado de El Álamo, queda aparcado. Mientras, las aerolíneas de vuelos de negocios operan en instalaciones provisionales y exigen utilizar la T-3 de Barajas, como les habían prometido.
La empresa Aeropuertos de Madrid, con capital 100% de la comunidad presidida por Esperanza Aguirre, está en proceso de liquidación. Fuentes del Gobierno madrileño han confirmado que en principio Aeropuertos se pensaba incorporar a la sociedad pública Mintra, pero esta también desaparece y sus competencias se integran en la Dirección General de Infraestructuras.
La amortización de Aeropuertos de Madrid deja aparcado el que fuera uno de los proyectos estrella del Gobierno de Aguirre en la anterior legislatura: la construcción del aeropuerto privado de Madrid, El Álamo, en el sur de la comunidad, cerca de Navalcarnero. Este aeródromo, del que ya se habían definido los proyectos constructivos y se había iniciado el proceso de adjudicación, tenía un presupuesto de 180 millones.
La Comunidad de Madrid había firmado acuerdos con el Ministerio de Fomento para trasladar a El Álamo la actividad en Madrid de los vuelos de negocio, hoy repartida entre Torrejón y Barajas, y la llamada aviación general (trabajos aéreos, enseñanza, aviación deportiva, etc.), que hoy se concentra en el aeródromo de Cuatro Vientos.
Tras el cierre de Spanair, la T-3 de Barajas está infrautilizada
Las fuentes citadas justificaron la liquidación de Aeropuertos de Madrid como parte del proceso de reestructuración del sector público dependiente de la comunidad acometido el pasado mes de diciembre. Reconocen, no obstante, que la decisión ha sido alentada por la "desastrosa imagen que ofrecen muchos aeropuertos privados y públicos en los que se han gastado millones y que ahora no son capaces de atraer ni vuelos ni pasajeros".
La liquidación de la empresa Aeropuertos de Madrid y la congelación del proyecto del aeródromo de El Álamo ha caído como un jarro de agua fría en el sector español de aerolíneas de vuelos de negocios. José Ramón Barriocanal, presidente de su patronal, la Asociación Española de Aviación Ejecutiva (Aesave) y director general de Gestair, ha explicado a CincoDías que el proyecto del aeródromo privado en el sur de Madrid "era una alternativa adecuada a medio plazo" para solucionar los graves problemas que padece la aviación ejecutiva en su mercado principal, el de la capital de España.
Barriocanal denuncia que, dos años después de haber llegado a un acuerdo con el Ministerio de Fomento para que la aviación ejecutiva pudiera utilizar las antiguas instalaciones de Air Nostrum en la Terminal 3 del aeropuerto de Madrid-Barajas, el sector se ve obligado a operar en "las más deplorables condiciones de provisionalidad".
El presidente de Aesave recuerda que Madrid es el destino o el origen del 50% de los aproximadamente 50.000 pasajeros y 9.000 vuelos que realizó la aviación ejecutiva el año pasado en España. El parque de este tipo de aeronaves se ha reducido de manera significativa por la crisis, pero todavía supone una flota de unos 50 aparatos.
Las aerolíneas y los usuarios de este tipo de transporte (mayoritariamente grandes empresarios, ejecutivos y profesionales) se ven obligados a soportar una arbitraria división de la operación según el tamaño de los jets. Los pequeños operan desde la base militar de Torrejón de Ardoz y los grandes (a partir de 10 pasajeros) lo hacen desde la T-4 de Barajas. Esta división provoca toda suerte de incomodidades y retrasos.
La solución de trasladar la operación de jets de negocios a la Terminal 3 de Barajas, según Barriocanal, es "barata y adecuada y podría aplicarse de manera inmediata". Esta zona del aeropuerto de Madrid lleva sin uso seis años, desde que la abandonó Air Nostrum para situarse en la T-4. Ahora se encuentra aún más infrautilizada tras la desaparición de Spanair.
El tráfico de jets privados cayó el 4,5% en España
La crisis golpea el tráfico de viajes en jet privado para el mercado español con una caída en 2011 del 4,5%. Los vuelos internacionales, sin embargo, crecen un 5,5%, impulsados por el tirón de los intercontinentales. La situación económica también ha variado el objetivo del viaje. En 2007 se llegó a utilizar jet privado para usos de ocio, pero ahora el 97% de las operaciones son viajes de negocios. La desaparición de operadores como Jet Ready, Jet Foryou, VerylightJet o Soco, es otra característica de la situación. Las compañías supervivientes, Gestair, Exjecutive, TAG o Corporate se quejan de las graves subidas de tasas aeroportuarias que en Madrid son del 31% y en Barcelona del 21%.Alemania, con un crecimiento del 5,3%, y Polonia, con un aumento del 13,3%, se han convertido en países con el ciclo cambiado del sector en Europa.
Campo Real
La comunidad de Madrid, cuando su presidente era Alberto Ruiz-Gallardón, avanzó en los planes para la construcción de otro aeropuerto en la localidad de Campo Real, en el sur, destinado a tráfico de cargas, que también queda ahora en suspenso.