Van Rompuy y Barroso dicen que empieza a tener efecto la estrategia para salir de la crisis
El presidente del Consejo de la Unión Europea, Herman Van Rompuy, y el jefe del Ejecutivo comunitario, José Manuel Durao Barroso, han señalado que empieza a "surtir efecto" la estrategia de la UE para frenar la crisis, pero han alertado de que la situación sigue siendo "frágil", por lo que es necesario que los gobiernos mantengan el rigor presupuestario.
"Parece que la Unión Europea empieza, por fin, a recuperar la estabilidad y el crecimiento. Seamos claros, hay menos tensiones en la zona euro, pero no hemos salido aún de la crisis. La situación aún es frágil y debemos concluir nuestras acciones", ha dicho Barroso en un debate ante el pleno del Parlamento Europeo para dar cuenta de los resultados del último Consejo europeo del 1 y 2 de marzo.
También el presidente del Consejo ha opinado que la estrategia de la Unión Europea para frenar la crisis "empieza a surtir efecto" y se ha producido un "punto de inflexión" hacia la recuperación. Van Rompuy ha dicho que los líderes europeos son "plenamente consciente" de la "fragilidad" de la situación y ha subrayado la necesidad de acciones "a corto y largo plazo para el crecimiento".
Van Rompuy ha advertido de que, además de la política económica europea que marca la llamada estrategia 2020, son necesarias "políticas específicas" para el empleo, en especial para hacer frente al desempleo juvenil. A este respecto, ha explicado que la responsabilidad de estas acciones recae en los Estados miembros, pero la Unión Europea puede ofrecer "orientaciones y directrices".
Sobre el papel del Banco Central Europeo (BCE), el presidente del Consejo ha recordado que se trata de un organismo independiente que "adopta sus propias decisiones" y ha confiado en que está preparado para "ayudar" porque "se siente más tranquilo por la disciplina fiscal" que han asumido los gobiernos nacionales.
Por su parte, Barroso ha pedido que "no se haga un drama constante con el euro" y ha apostado por cuidar las condiciones de estabilidad que se han recuperado con acciones concretas para mantener el modelo social, al tiempo que ha recalcado la importancia del diálogo social porque es "esencial" y ha animado a la negociación entre patronal y sindicatos a escala nacional.
"No, el modelo social europeo no ha muerto, pero necesitamos una Europa más competitiva que ofrezca estabilidad y crecimiento a través de la responsabilidad y la solidaridad", ha explicado.
Barroso y Van Rompuy han aprovechado su intervención ante los eurodiputados para defender la estrategia mantenida con Grecia y subrayar los progresos en el programa de ayuda al país heleno.
Van Rompuy ha reprochado las críticas de quienes acusan a la Unión Europea de imponer un rigor excesivo a Atenas y les ha recordado que los países del euro y el Fondo Monetario Internacional (FMI) se han comprometido a un segundo rescate de 130.000 millones de euros. Sin estos esfuerzos, ha indicado, la "difícil" situación que vive Grecia sería "incluso peor".
Barroso, además, ha apuntado la importancia de que los ajustes del Gobierno griego se acompañen con inversiones en sectores clave para recuperar la senda del crecimiento y crear empleo. Para contribuir a ello, Barroso y su comisario de Asuntos Económmicos, Oli Rehn, presentarán "en los próximos días" una propuesta para el crecimiento y el empleo y con las prioridades para Grecia en el futuro.