Peugeot y General Motors negocian unirse para bajar costes
El grupo automovilístico francés reconoció ayer que examina "proyectos de cooperación y alianzas" aunque no desveló con quién. No obstante, el Gobierno francés se apresuró a confirmar que se trata del grupo americano General Motors.
El grupo automovilístico francés PSA Peugeot Citroën reconoció ayer que mantiene discusiones con vistas a eventuales alianzas, principalmente industriales aunque no quiso desvelar con quien. Sin embargo, el Gobierno francés se precipitó a confirmar que el candidato es la automovilística estadounidense General Motors. La prensa francesa, por su parte, avanzó que podría materializarse en marzo. Por parte de General Motors, fuentes oficiales en España dijeron que "el grupo mantiene de forma rutinaria contactos con otros grupos de la industriales".
El ministro francés de Trabajo, Xavier Bertrand, declaró en una entrevista a la emisora de radio Europe 1, que el propio presidente de PSA, Philippe Varin, le había informado por la mañana de las discusiones con el gigante estadounidense, y que era "una buena noticia" para la compañía.
PSA, por su parte, remitió un lacónico comunicado en el que confirmaba que "las discusiones están en marcha y no hay ninguna certidumbre de que se completen". La firma francesa señaló que "en el marco de su estrategia de globalización y de mejora de su resultado PSA Peugeot Citroën examina proyectos de cooperaciones y de alianzas".
El diario francés La Tribune en su página web, sin citar fuentes, aseguraba ayer que las negociaciones con el gigante estadounidense se llevan a cabo hace varios meses con el objetivo de establecer "una alianza, no cooperaciones puntuales". Aunque el proceso de discusiones está "avanzado" y podría formalizarse a comienzos de marzo coincidiendo con el Salón del Automóvil de Ginebra, latribune.fr ha puntualizado que "por ahora no hay acuerdo" y ha destacado que hace falta el aval de la familia Peugeot.
Una eventual alianza se limitaría a aspectos industriales, según fuentes citadas por la agencia Reuters, que descartan un intercambio accionarial de peso. Sería "pequeño y simbólico", matiza. El fin, según estas fuentes, es obtener economías de escala para rebajar costes en la producción. Nada despreciable, pues entre GM (el mayor fabricante del mundo ) y PSA (el segundo de Europa) montan 11 millones de vehículos anuales. Lo que acarrearía ajustes de las actuales capacidades industriales y, posiblemente, de la plantilla. Fuentes sindicales de General Motors declararon no tener conocimiento de la operación
Para PSA se trataría de adquirir un tamaño crítico de escala mundial, que ahora no tiene, con el fin de financiar su despliegue internacional. Además, no pasa por buenos momentos, pues el pasado año sufrió un retroceso de su beneficio del 58%, hasta 588 millones.
PSA sube; Gm baja
Los inversores apuntaron a PSA como un claro beneficiario de una posible alianza estratégica y sus acciones subieron en el mercado francés un 12,06%, a 16,12 euros, que contrasta con el descenso del 0,89% del Euro Stoxx 50. Por contra, castigaron a General Motors con un descenso del 1,88%, por encima de la caída del 0,33% en el índice S&P 500 donde cotiza.