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El escarmiento a Grecia sienta un precedente para el resto de países con déficits excesivos

La UE asume el control previo sobre los presupuestos

Los ministros de Economía de la UE concedieron ayer a Bruselas la potestad de corregir y revisar los presupuestos nacionales antes de su aprobación. La cesión de soberanía se produce el mismo día que el Gobierno griego aceptó la presencia "permanente" en Atenas de funcionarios comunitarios para supervisar su política económica.

El ministro español de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, y los ministros de Finanzas de Reino Unido, George Osborne (izquierda), y de Portugal, Vitor Gaspar, en la reunión de ayer del Ecofin en Bruselas.
El ministro español de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, y los ministros de Finanzas de Reino Unido, George Osborne (izquierda), y de Portugal, Vitor Gaspar, en la reunión de ayer del Ecofin en Bruselas.EFE

Un pequeño paso de Bruselas hacia el gobierno económico de la zona euro, pero un gran salto en la cesión de soberanía presupuestaria por parte del resto de capitales. Así podrían resumirse los dos proyectos de reglamento aprobados ayer por el consejo de Ministros de economía de la UE (Ecofin) para reforzar la supervisión presupuestaria y la prevención de riesgos macroeconómicos en el seno del club comunitario, hasta el punto de que se podrá obligar a un país a retocar su presupuestos o a solicitar un plan de rescate internacional como los de Grecia, Irlanda y Portugal. Además se deberá informar a Bruselas por adelantado sobre los planes de emisión de deuda nacional.

El ministro español de Economía, Luis de Guindos, señaló al término del Ecofin que ambos reglamentos "avanzan en el gobierno económico y la coordinación de nuestras políticas presupuestarias".

Uno de los textos fija un calendario preciso para la elaboración de los presupuestos, cuyo proyecto deberá ser revisado en Bruselas, y enmendado si hace falta, antes de su aprobación definitiva en los respectivos parlamentos.

El reglamento, que entrará en vigor cuando reciba el visto bueno del Parlamento Europeo, establece la obligación presentar cada año, a más tardar el 30 de abril, los planes presupuestarios a medio plazo. Seis meses después, con el 15 de octubre como fecha límite, "deberá hacerse público el proyecto de presupuestos de la Administración central", elaborado en base a previsiones económicas independientes. Y acompañado de los principales parámetros presupuestarios del resto de Administraciones.

La Comisión Europea dispondrá entonces de dos semanas para exigir la corrección de aquellos presupuestos que violen de manera flagrante el Pacto de Estabilidad y Crecimiento.

La UE asume así un control previo de los presupuestos que hasta hace poco se veía como una injerencia inaceptable en la soberanía democrática. La crisis de la deuda ha cambiado esa percepción. Sobre todo, tras el escarmiento a Grecia, que ayer aceptó una cesión de soberanía sin precedentes a cambio de un segundo rescate de 130.000 millones de euros (España avalará el 12% de los préstamos de la zona euro, cuya cuantía final dependerá de la aportación del FMI, todavía por precisar; algunas fuentes cuantifican la aportación española en unos 15.000 millones).

La aprobación definitiva de los préstamos se dejó para marzo, pero Grecia ya ha aceptado "la presencia permanente sobre el terreno" de funcionarios comunitarios para verificar la ejecución presupuestaria y de las reformas exigidas. El éxito del plan, sin embargo, "dependerá del comportamiento de la economía griega", como reconoció al término del Ecofin Luis de Guindos. El ministro español confía en que "este primer paso" permita a Grecia "ajustar el déficit, recuperar el crecimiento y volver a financiarse en los mercados".

Fuentes diplomáticas reconocen que el rescate de Grecia marca un antes y un después en la supervisión de las políticas económicas. "Todo el mundo asume que las decisiones presupuestarias pueden tener repercusiones en el vecino y desestabilizar al conjunto de la zona euro", señalan esas fuentes.

Ese convencimiento permitió ayer la aprobación de un reglamento, pendiente de pasar por el Parlamento, que permitirá forzar el rescate de un país. La tramitación de la propuesta se realizará de forma confidencial para no alentar la especulación contra el país afectado. Pero se podrá explicitar la recomendación si el Gobierno de turno se resiste.

Coto a las ventas a corto y a los seguros de impago

Los ministros de Finanzas de la Unión Europea dieron ayer su aprobación formal a una normativa que limitará a partir de noviembre la especulación con deuda soberana que estuvo en el origen de la crisis financiera.El Ecofin acordó prohibir las transacciones al descubierto de los seguros de impago vinculados a la deuda soberana -los denominados credit default swaps- y endurecer las normas para las ventas en corto al descubierto de acciones y bonos.La aprobación, que respaldaron los socios europeos a excepción de Reino Unido que se abstuvo, se produce después de que la semana pasada países como España, que habían prohibido la venta en corto, decidieran retirar el veto, lo que provocó el desplome de la banca en la Bolsa y una reducción de su valor en 5.411 millones de euros en un día.En las ventas a corto los inversores venden acciones con la expectativa de que baje su valor para comprarlas luego a menor precio y ganar la diferencia. Las ventas al descubierto, prohibidas en España, son una modalidad en las que el vendedor no posee las acciones.

Las claves del segundo rescate de Grecia

¿Cuánto dinero recibirá Grecia en virtud de lo acordado en Bruselas la pasada madrugada?El nuevo paquete de salvamento, que se suma a los 100.000 millones del primer rescate, asciende a unos 130.000 millones de euros hasta 2014. El importe final de la ayuda se decidirá cuando se conozca el grado de participación del sector privado y Grecia haya puesto en marchalos planes de ajuste. Lo más urgente para el país es lograr el dinero necesario para afrontar el próximo pago de deuda pública, previsto para el próximo 20 de marzo, y que asciende a unos 15.000 millones.¿Es el pacto definitivo o habrá más ayudas a partir de 2015? El escenario ideal sería que Grecia vuelva a financiarse en los mercados a partir de 2015. Pero esto es muy complicado. El plan de rescate parte de un escenario base en el que, tras una contracción del PIB del 4,3% este año, la economía griega volverá al crecimiento en 2014. Así, el PIB debería crecer por encima del 2% de 2014 a 2020 para cumplir con el objetivo de rebajar la deuda sobre el PIB al 129% en 2020. Pero en un escenario más adverso, en el que el crecimiento al 2% se retrase a 2016, la troikatambién reconoce que la deuda sobre el PIB aún se elevaría al 159% en 2020. Y serían necesarias ayudas por 50.000 millones de euros adicionales en 2015.¿Cuál va a ser el papel de los acreedores privados, qué quita deberán aplicarse? Los acreedores privados -inversores en deuda pública, al margen del BCE, los bancos centrales y el FMI- aceptarán unas pérdidas del 53,5% sobre el nominal de sus bonos. Es decir, quien tuviera 100 euros en deuda recibirá 46,5 euros. Pero el verbo "recibir" es una metáfora, ya que no cobrarán nada. Lo que se les da son dos nuevos bonos. El primero es deuda griega por el 31,5% del valor nominal del antiguo bono (el equivalente a 31,5 euros, siguiendo el ejemplo anterior). Tendrá un vencimiento a 30 años y una rentabilidad que empezará en el 2% e irá subiendo en el tiempo hasta llegar al 4,3%. La segunda parte asciende al 15% del valor nominal y llegará a los inversores en forma de letras a dos años respaldadas por el fondo de rescate europeo.¿Qué pasa si los inversores privados se niegan a participar? Para que el plan surta efecto sin tener que activar los seguros contra el impago de la deuda (CDS), sería necesario que el 100% de los inversores privados aceptara el pacto. Grecia ha introducido cláusulas que obligarán al canje si no se consigue la aceptación necesaria.¿Qué ha ofrecido Grecia como contrapartida al rescate?Grecia ha diseñado otro plan de ajuste de 3.300 millones en el Parlamento, con el compromiso escrito de los dos líderes mayoritarios de que aplicarán los recortes gane quien gane las elecciones y ha identificado medidas adicionales para ahorrar 325 millones. Y también ha cedido soberanía: un equipo de supervisión permanente de la troika, una cuenta blindada que dispondrá siempre del suficiente capital para hacer frente al menos a tres meses de vencimiento de sus obligaciones y prioridad constitucional al pago de la deuda, informan P. M. Simón e I. Abril.

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