Capital One compra por 9.000 millones la filial estadounidense de ING Direct
La Reserva Federal aprobó anoche la primera gran fusión entre entidades que se produce bajo la nueva regulación financiera, más exigente con la viabilidad de las entidades. Se trata de la compra de la filial estadounidense de ING Direct, adquirida por 9.000 millones de dólares, por parte de Capital One. El banco resultante será el quinto del país por depósitos.
El banco estadounidense Capital One logró cerrar ayer una operación que al parecer venía persiguiendo desde junio del año pasado: la compra de la filial estadounidense de ING Direct. La adquisición, con un coste de 9.000 millones de euros, recibió esta madrugada el necesario visto bueno de la Reserva Federal.
La compra de ING Direct por parte de Capital One es la primera gran operación de este tipo que se cierra desde la aprobación de la reforma financiera Dodd-Frank, en 2010, que eleva las exigencias que debe plantear el regulador al analizar la viabilidad y los peligros que envuelven una fusión entre entidades. El objetivo es que el sistema financiero no asista a nuevos casos de quiebra o rescate de sus grandes socios.
El comunicado emitido por la Fed garantiza que se "instó a Capital One a tomar medidas específicas para asegurar que sus sistemas de gestión de riesgos son acordes a su nuevo tamaño y complejidad". Después de todo, la unión de ambas entidades generará el quinto banco de EE UU por volumen de depósitos, la undécima por activos.
Capital One, con sede en el estado de Virginia, espera que el proceso quede culminado a lo largo del primer trimestre.