El euríbor caerá en enero, pero las hipotecas siguen al alza
El euríbor, el indicador de referencia para calcular las hipotecas, cerrará enero en el 1,84%, su tercer descenso mensual consecutivo y una tasa que, aunque inferior al 2,004% de diciembre, encarecerá las hipotecas en alrededor de 250 euros anuales.
Este encarecimiento se producirá porque la tasa media del euríbor de enero de 2012 (1,84%) es mayor que la de enero de 2011 (1,550%).
Aunque aún faltan dos sesiones para que finalice el mes, la tasa media del indicador correspondiente a enero se sitúa en el 1,844%, un dato que, de confirmarse el martes, hará que el euríbor vuelva a los niveles de febrero de 2011, mes en el que cerró en el 1,714%.
Pese a ello, esta tasa media sería todavía algo superior a la que registró en enero de 2011 (1,550%), con lo que, nuevamente, se volverían a incrementar las cuotas de las hipotecas.
Aunque eso sí, en menor medida que en los meses precedentes.
En concreto, la cuota media de una hipoteca de unos 150.000 euros contratada hace un año que se revise en febrero y a la que se aplica la tasa del mes anterior se encarecerá de media en 21 euros al mes, 252 euros al año.
A lo largo de enero, el indicador ha seguido una trayectoria bajista que lo ha llevado a perder más de una décima, desde el 1,937% del día 2 hasta el 1,768 % del pasado viernes, su nivel intradía más bajo desde el 28 de febrero de 2011.
La evolución del euríbor suele depender de las subidas o bajadas de tipos que aprueba el Banco Central Europeo (BCE), que en el último trimestre de 2011 aprobó dos subidas -en abril y en julio-, y dos rebajas, en noviembre y en diciembre, hasta situar la tasa en el 1%.
Al término de la reunión del Consejo de Gobierno de la entidad de diciembre, su presidente, Mario Draghi, no hizo mención explícita a nuevos recortes de tipos, pero mostró su compromiso para combatir el peligro de recesión en la zona del euro.
De este modo, los analistas no descartan nuevas bajadas de tipos este año, si bien no se producirán en el primer trimestre del año.
En su reunión de enero, el BCE decidió mantener los tipos de interés en el 1%.