Botín respalda la reforma financiera que prepara Guindos
El presidente de Banco Santander afirma que, en líneas generales, es "adecuada, correcta y necesaria"
El presidente de Banco Santander, Emilio Botín, aseguró ayer que la reforma financiera que prepara el Gobierno y de la que ya se conocen las líneas generales es "adecuada, correcta y necesaria". Botín, que participó en la firma de un convenio de colaboración con el ayuntamiento de la localidad madrileña donde el banco tiene su sede principal, Boadilla del Monte, reconoció que estas medidas provocarían una nueva ronda de fusiones.
La intención del nuevo Ejecutivo, que ha establecido en 50.000 millones de euros las provisiones adicionales que deberá realizar la banca para cubrir los riesgos inmobiliarios de sus balances, es aprobar la reestructuración del sector financiero en las próximas semanas y que esté lista para mediados de febrero. Fuentes del sector consideran que se dará un plazo de dos años a aquellas entidades que decidan cargar las provisiones contra beneficios. Solo en el caso de una fusión será posible que estas se carguen contra reservas.
De hecho, otro de los objetivos que se ha marcado el Gobierno de Mariano Rajoy como prioritario es acelerar las fusiones entre entidades y que el mapa financiero quede reducido a una decena de ellas en los próximos meses. El tope máximo que ha fijado el Ejecutivo para que las entidades más fuertes hayan absorbido a las más débiles es el primer semestre de este año. De momento, el Banco de España se encuentra en pleno proceso de subasta de Unnim (las ofertas en firme se presentarán el próximo 20 de febrero), a la que le seguirá la venta de Banco de Valencia.
Botín también se refirió a la reforma laboral que aprobará el Consejo de Ministros en sus próximas reuniones, y apuntó que es "una medida necesaria que llegará a buen puerto". Además, el presidente de Banco Santander se mostró convencido de que España acabará saliendo de la presente crisis económica.