Moody's confirma la triple A francesa
La agencia de calificación crediticia ha anunciado esta mañana que de momento mantiene su nota a Francia. Esta noticia se conoce dos días después de que S&P rebajase el rating de la deuda gala debido a la incertidumbre que domina en el Viejo Continente.
Las medidas anunciadas en los últimos tiempos pueden no ser suficientes para acabar con los riesgos sistémicos de Europa. Esa ha sido la razón que ha llevado a S&P a rebajar la calificación de Francia y otros ocho países de la eurozona. El país galo, que desde hace meses ha puesto en marcha diferentes iniciativas para preservar la máxima calificación, vio cómo el viernes S&P degradaba su nota y perdía así la triple A.
Sin embargo, esta mañana Moody's no ha querido quedarse atrás y ha salido a la palestra tras confirmar que de momento mantiene el rating de una de las grandes locomotoras del Viejo Continente. De hecho en la nota enviada, la agencia señala que mantiene en perspectiva estable la deuda soberana y aunque a día de hoy no tiene pensado rebajar su status cree que existen riesgos que podrían desembocar en la pérdida de la AAA. Entre los peligros a los que hace referencia se encuentra un déficit del 5% que podría comprometer su crecimiento.
A finales de noviembre esta misma agencia indicaba que ponía en revisión la nota de Francia y que a lo largo de los próximos tres meses podría rebajarla si los costes del rescate bancario y de otros países de la eurozona se hacían sentir en los presupuestos.
El aviso sobrevolaba la economía del país vecino. Ante este panorama el primer ministro, François Fillon, anunció nuevas medidas de ahorro, la segunda en menos de tres meses. Entre las iniciativas con las que se busca reducir el gasto en 8.000 millones de euros se encuentran la subida del IVA, del impuesto de sociedades y los ajustes en el sistema de seguridad social.
Además para 2012 se espera aprobar los presupuestos más austeros desde la Segunda Guerra Mundial con el fin de que la ralentización no se haga notar en su economía.