El volumen se retira del mercado, a la espera de enero
La Bolsa se apoya en los datos macro de EE UU.
El final de la semana en Europa nos ha dejado un día muy triste y gris en donde todo lo ganado en España se ha conseguido con el gap de apertura. El jueves no se logró superar la zona de los 8.400 puntos y la insistencia en esa resistencia nos hace recordar a la Fórmula 1 cuando la única manera de superar al contrario es con una entrada en boxes. Pues bien, esa entrada ha sido el paso a la sesión siguiente.
El punto de duda nos lo ha puesto Europa y, en concreto el futuro del Dax, ya que ha eliminado todo ese hueco de apertura sobre la sesión del jueves. Las dudas han empezado a entrar en el mercado y nos hemos visto incapaces de avanzar de forma contundente mientras no paraban de aparecer opiniones sobre lo que pueden hacer los bancos con el dinero de la subasta del BCE. Poco a poco parece que nos estamos calmando y asimilando que los bancos primero utilicen ese dinero para sí mismos y después ya veremos. El que saneen su estado tampoco parece tan malo y quizá es lo que ha hecho que el Ibex 35 tenga a su futuro subiendo más que el resto, ya que la deuda de la periferia no ha servido como punto de referencia en un mercado que estaba parado.
Por otra parte, en EE UU, los datos siguen su racha de crecimiento, aunque algunos de ellos son menos positivos de lo que se esperaba, como esa partida de pedidos de bienes duraderos sin transportes. La trayectoria del dólar es complicada, porque los buenos datos macro hace que suba por gustar más los activos de riesgo; si los datos son buenos pero no tanto, favorecen al dólar porque siguen beneficiando a la economía de EE UU. En este par de divisas hay que hilar muy fino.
El bajo volumen ha sido la característica de la semana y ha permitido que no se generen movimientos exagerados, lo que ha dado tranquilidad a los mercados.
Al final, los dos súper sectores que más se han movido ha sido el de las utilities por la entrada de la china Tres Gargantas en EDP y el de petroleras, por la consabida presión alcista que tiene el precio del crudo por las tensiones de Irán y por los factores técnicos del precio.
Ahora comienza la cuenta atrás para el nuevo año y para todos esos vencimientos que vendrán en enero y que coge a los índices norteamericanos ligeramente por encima de resistencias y niveles técnicos importantes que hacen que tengamos que prestar mucha atención cuando el volumen vuelva otra vez para saber si dan por buenas esta subidas o corrigen el mercado para volver a donde estaban.
La deuda más segura de Europa se mantiene estable ayudada por las informaciones que han aparecido de que S&P ha avisado de que el veredicto sobre la rebaja de calificaciones de 15 de las 17 naciones de la zona euro podría ver la luz en enero. Esto sería una faena, ya que si ésta parece justo en los momentos de subastas, podríamos tener una presión extra que complicase la situación.