Madrid gana dos estrellas Michelin y Can Fabes pierde la tercera

Se desveló la incógnita más esperada del año, con pocas sorpresas y muchas decepciones. Ningún tres estrellas Michelin este año. Y Cataluña pierde dos de sus tres estrellas, elBulli, cerrado desde el 30 de julio, y Can Fabes, que pierde la tercera estrella, a los nueve meses de fallecer el chef, Santi Santamaría, a pesar del trabajo continuista del chef Xavier Pellicer. En esta comunidad quedan con el máximo galardón El Celler de Can Roca (segundo mejor restaurante del mundo, según la clasificación de la revista Restaurant), de los hermanos Roca, en Gerona, y Sant Pau, de Carmen Ruscalleda, la cocinera con más estrellas del mundo (cinco, tres en Barcelona y dos en Japón).

Los inspectores de la guía han vuelto a castigar a Andoni Luis Aduriz (Mugaritz, San Sebastián), a Quique Dacosta (Dacosta, Denia, Alicante), a Dani García (Calima, Marbella) y a Toño Pérez, al frente de Atrio, considerado uno de los restaurantes más completos desde la inauguración hace casi un año del nuevo hotel en Cáceres. Otro eterno aspirante, en este caso a dos estrellas, es Casa Gerardo, en Prendes (Asturias), que se queda sin galardón.

En cambio, reciben la segunda distinción Diego Guerrero, al frente del Club de Allard (Madrid); David Muñoz, de Diverxo (Madrid), y Jordi Cruz, de El Ábac (Barcelona), que el año pasado perdió la segunda y en esta edición la recupera.

Madrid no ha quedado mal porque recibe su primera Michelin Rodrigo de la Calle, de Aranjuez, que el año pasado fue propuesto como promesa por los inspectores de Michelin, al igual que Diego Guerrero, que ha obtenido el segundo galardón. También se estrena Josean Martínez Alija, del restaurante Nerua en el Museo Guggenheim de Bilbao. Y recupera su estrella Michelin Marcelo Tejedor, de Casa Marcelo (Santiago, La Coruña), tras perderla en 2010.