La crisis económica 'logra' que el 16% de los hogares viva en alquiler
La encuesta de presupuestos familiares que elabora el Instituto Nacional de Estadística (INE) acaba de hacer público el último y único dato oficial sobre cuánto representa el alquiler en el mercado inmobiliario español. De un 13,5% que pesaba en 2006 se ha logrado llegar al 16,09% en 2010. La crisis, y no tanto las políticas públicas, es la principal responsable de este avance.
Buenas noticias, aunque según se mire. Por fin parece que el arrendamiento de viviendas empieza a ganar protagonismo entre las familias españolas. Frente al gusto casi universal por acceder a una casa en régimen de propiedad, cada día más españoles se decantan por vivir de alquiler. Pero ¿estos nuevos inquilinos lo son por convicción o por necesidad?
Las cifras no entran a valorarlo, pero los expertos no dudan: la crisis es la principal culpable de esta realidad. La encuesta continua de presupuestos familiares (ECPF) que elabora el INE acaba de poner cara a ese aumento. En 2006, en plena burbuja inmobiliaria, el porcentaje de familias que residía en una casa de su propiedad era del 81,30%, el más alto de Europa, y apenas un 13,56% lo hacía en un piso de alquiler. A finales de 2010, último dato disponible, el INE constata cómo los propietarios se han reducido al 78,39% de los hogares y quienes optan por el arrendamiento representan ya el 16,09% del total.
Las otras modalidades del régimen de tenencia de los inmuebles (fruto de cesiones, por ejemplo) se mantienen estables sobre el 5% del parque.
Renta básica y SPA
A pesar de este aumento, España, junto con Italia y Grecia, continúa siendo uno de los países con menos tradición de alquiler. El promedio de la Unión Europea se sitúa en torno al 40%, si bien hay países como Alemania donde la tendencia ahora es justo la contraria. Los alemanes, que hace muy pocos años se decantaban mayoritariamente por ser arrendatarios (su mercado de alquiler llegó a representar el 60%), parecen estar evolucionando hacia un modelo más equilibrado con las casas en propiedad.
El Gobierno español se había puesto como objetivo alcanzar el 20% de alquileres en el año 2020, con lo que este sensible aumento, aunque sea achacable a la crisis, hace pensar que esa cifra es alcanzable. Y lo cierto es que aunque los resultados no hayan sido siempre los esperados, desde 2004 se han puesto en marcha distintas iniciativas para fomentar el arrendamiento de pisos.
Por orden cronológico, la primera fue la creación de la Sociedad Pública de Alquiler, el aumento de las subvenciones para pisos de protección oficial dentro del Plan cuatrienal de Vivienda, la puesta en marcha de la renta básica de emancipación y la recuperación de la deducción fiscal del alquiler con el fin de equipararla a la desgravación por adquisición.
La estadística de precios de compra cuesta 175.800 euros
El Ministerio de Fomento ha adjudicado a Atasa el contrato de recogida de datos sobre precios medios de las viviendas tasadas entre abril de 2011 y marzo de 2012 por un importe de 175.800 euros, informa Europa Press.El departamento que dirige José Blanco ha seleccionado a este adjudicatario "por ser el único proveedor válido de la información para la elaboración de la estadística que determina los índices de precios de viviendas".El contrato se ha adjudicado a través de un procedimiento negociado por el mismo importe al que se licitó, según publicó ayer el Boletín Oficial del Estado (BOE). Aunque la exministra de Vivienda María Antonia Trujillo ya intentó en 2004 cambiar la metodología de esta estadística para que, en su opinión, "reflejara mejor los vaivenes del mercado", al final desistió y firmó un convenio con los tasadores para que fueran estos quienes suministraran los precios inmobiliarios.
Los expertos reclaman más medidas a favor del arrendador
El aumento del número de familias que reside de alquiler, sea por la crisis o por convicción, ha de servir de estímulo para que los próximo responsables del Gobierno continúen con las reformas pendientes.Pese al intento por agilizar los procesos judiciales con el llamado desahucio exprés, los expertos reclaman más medidas normativas que aumenten la seguridad jurídica del arrendador porque los desalojos todavía se alargan al menos un año, aproximadamente. También, exigen que los plazos de los contratos de arrendamiento puedan reducirse de los cinco años actuales a tres. Todos los partidos que concurren a las elecciones del 20-N coinciden en que la política pública de Vivienda debe centrarse en subvencionar el alquiler y no la compra de casas de protección oficial (VPO), por lo que parece que gane quien gane habrá cambios importantes en esta materia.