Sólo queda esperar un poco más
Con menos expectativas de acuerdo en Europa, la sesión se prevé volátil, muy pendiente el mercado de las declaraciones.
Hoy nos enfrentamos a la última sesión antes de la famosa cumbre europea y que tantos sustos nos ha estado dando desde finales de la semana pasada. Primero nos asustamos porque se mantenían las discrepancias entre Francia y Alemania, después nos asustamos porque habría una segunda reunión el miércoles y nos volvimos a asustar porque el Ecofin de hoy se suspendió. Total, la incertidumbre se ha metido muy dentro del mercado y parece que va a ser difícil sacarle de esta situación.
Lo que al final se conoció ayer sobre el acuerdo de hoy, no gustó nada al mercado porque son unas líneas muy generales y no hay certidumbre sobre datos concretos de ningún tipo, o por lo menos del tipo que le gustaría al mercado. Si algo nos está quedando muy claro y que hay que cambiar en Europa es la tremenda cantidad de burocracia con la que hay que tratar para tomar una decisión de calado, y que siempre nos lleva a la mente aquello de "venga usted mañana". Lo cierto es que la rapidez del mercado actual no está para de lentitudes de este tipo y es que en parte tiene razón, porque cuanto más se tarde en disparar el plan general, más se incrementa el problema de la financiación de los países en peligro porque las subastas de su deuda continúan sin cesar. Ayer tuvimos una muestra de esto con la colocación en nuestro país de deuda a 3 y 6 meses con una fuerte subida de rentabilidades.
Italia parece que ha llegado in extremis a un acuerdo con la Liga Norte para avalar una reforma del sistema de pensiones pero que no ha eliminado las dudas sobre la supervivencia del Gobierno a todas estas reformas. A partir de hoy Italia se enfrenta a unas cuantas subastas de deuda pública en donde tomaremos el pulso no sólo a sus propias reformas sino a las conclusiones de la reunión de hoy en Europa.
Y hablando de conclusiones, el ministro de economía holandés dice que las negociaciones de hoy serán difíciles y que no necesariamente acabarán con un acuerdo definitivo y eso hace que cada vez vayamos buscando más cumbres en donde se pueda ver a los políticos manos a la obra para ir apretando las tuercas de este posible plan, como la reunión del G 20 de noviembre.
Ayer los mercados se tomaron un respiro para volver a tomar tierra antes de esta cita tan importante. Lo cierto es que si miramos los índices de Dow Jones y S&P 500 veremos que hemos alcanzado los mínimos de junio, que son resistencia, y paso previo antes de atacar a la media de 200 sesiones. Una ayuda muy importante para las bajadas fue la amalgama que se creó tras unir un dato de confianza del consumidor de la Conference Board al peor nivel desde hace casi dos años y medio con los resultados de empresas muy pegadas a la economía real como 3M, que salieron peores de lo esperado. En conclusión, ayer lo tuvimos todo para bajar. A destacar las fuertes pérdidas del gigante Amazon en el fuera de horas tras presentar resultados que ha llegado a ser de cerca del 15%.
Volviendo a Europa, la famosa reunión tendrá lugar por la tarde, por lo que puede que tengamos un día también muy centrado en los comentarios que se viertan a los medios de comunicación antes de la misma, por lo que la volatilidad puede ser alta de modo sorpresivo. Cuando si habrá volatilidad esa a la hora de presentación de datos importantes en Estados Unidos como los pedidos de bienes duraderos a las 14h30 y la venta de viviendas nuevas a las 16h00 de la tarde, hora española.