La compañía aragonesa Contazara ha cambiado radicalmente el concepto de los contadores mecánicos tradicionales por equipos electrónicos , que no solamente miden el consumo, sino que también lo gestionan para una utilización más beneficiosa del agua. Los nuevos dispositivos establecen una infraestructura inteligente, que aumenta el patrimonio hidráulico de las ciudades , convirtiendo el agua en un factor de comunicación entre gestores y ciudadanos.
Contazara fue fundada en 1984 por dos familias aragonesas de dilatada tradición industrial. En 2007 obtuvo el premio Príncipe Felipe de Calidad Industrial. Desde 2009 , la empresa está integrada en el grupo israelí Arad.