Emirates factura 50 millones en su primer año de ruta Madrid-Dubái

El desembarco de Emirates en España ha superado las expectativas: generó unos 52 millones de euros en su primer año. Así lo asegura el director general de la compañía para la península Ibérica, Fernando Suárez de Góngora, que baraja un crecimiento del 5% para este ejercicio, que acaba en marzo de 2011. La aerolínea planea sumar más vuelos a Madrid y abrir sucursal en Barcelona.

Emirates es ya una marca reconocible para los españoles. Más de 160.000 pasajeros escogieron la aerolínea con sede en Dubái para viajar a la capital de Emiratos Árabes, ciudad que se ha sabido erigir en muy pocos años como centro financiero y de servicios a nivel mundial. La compañía ha facturado cerca de 70 millones de dólares (unos 52 millones de euros) desde que operara el primer vuelo el 1 de agosto de 2010.

El buen ritmo que han cogido las ventas y la alta ocupación de los vuelos, que se ha mantenido entre el 80% y el 95%, han situado las expectativas de crecimiento para el presente año fiscal, que finaliza en marzo de 2011, en un 5%. Ello ha llevado a la compañía a planear la incorporación de nuevos destinos con origen en Madrid, a abrir en Barcelona a lo largo del próximo año y medio y en una tercera ciudad española a medio plazo.

Las cifras logradas "exceden con mucho las expectativas", asegura Fernando Suárez de Góngora, director general de Emirates para España y Portugal. El máximo responsable de la compañía en la Península reconoce que para llegar a este punto han tenido que luchar contra el estigma que sitúa a Emirates como una compañía de alto lujo. Para ello se llevó a cabo un esfuerzo por ofrecer ofertas atractivas para vuelos de largo recorrido. Entre ellas destacan Pekín y Shanghái por 475 euros, Tokio por 587 o Delhi por 518. Todos ellos con escala en Dubái, dado que la promoción de dicha ciudad fue precisamente la razón del nacimiento de la aerolínea.

El lujo, no obstante, sigue siendo una parte importante de la oferta de Emirates, pese a que por el momento Suárez de Góngora reconoce que no es un segmento que funcione especialmente bien en España. La flota de la compañía cuenta, por ejemplo, con suites individuales, spa y duchas a bordo.

El grueso de la facturación de la firma árabe se reparte entre viajes de negocios y lo que llaman viajes étnicos (ida y vuelta de inmigrantes de cierto poder adquisitivo a sus países de origen, principalmente en Asia-Índico).

Emirates pretende posicionarse como compañía líder en los destinos del Índico (Seychelles, Mauricio y Maldivas), "la región vacacional del futuro", apunta Suárez de Góngora.

Primer usuario mundial del A-380

El buen rendimiento del vuelo Madrid-Dubái ha llevado a ir aumentando paulatinamente la capacidad de las naves en que se operan. Así, se empezó con un Airbus A-330, con 1.660 plazas semanales, para pasar luego al A-340 (1.870 plazas) y, a partir del próximo 31 de octubre, a los Boeing 777 (2.520 plazas).

Pero incorporar a España uno de los superjumbos de Airbus, los A-380, queda todavía lejos, aunque el responsable nacional de Emirates confía en que llegará tarde o temprano. No en vano, la compañía ha apostado fuertemente por estos colosos del aire. Actualmente cuenta con 15, y espera incorporar 75 más, uno mensual, hasta 2018, convirtiéndose en el mayor usuario de estos aparatos a nivel mundial.

Fiel al modelo de patrocinio deportivo

Emirates, igual que otras firmas como Santander, se ha convertido en una marca recurrente en el mundo del deporte. En el caso de la aerolínea, la apuesta es firme en el mundo del fútbol, en el que es el patrocinador principal de varios equipos europeos (entre los que destacan el Arsenal y el AC Milan).En España, destaca el acuerdo alcanzado con el Real Madrid el pasado mes de julio, cuando se convirtió en la aerolínea oficial del club. Asimismo, cuenta con una importante presencia en las vallas publicitarias de 12 estadios del país.

La cifra

75 son los Airbus A-380 que incorporará la aerolínea a su flota para 2018, alcanzando los 90. Este modelo tiene un coste medio de unos 280 millones.