Fuentes de Repsol señalaron, después de conocer la decisión de la CNE de inhibirse sobre el pacto, que han cumplido con su deber al solicitar el pronunciamiento del organismo regulador.
Desde la petrolera añadieron que esta petición a la CNE se ha hecho no sólo desde un enfoque exclusivamente jurídico sino también de fondo.
Sin prejuzgar el resultado, señalan, "cualquiera puede entender que una operación de este tipo debe ser objeto de análisis" y que la responsabilidad de la petrolera que preside Antonio Brufau es "atender las inquietudes" de todos los grupos de interés de la compañía: accionistas grandes y pequeños, empleados, sindicatos y clientes.