Rato emprende el relevo de la 'vieja guardia' del equipo de Blesa
Vuelven los cambios en Bankia y a gran escala. El consejo de administración de la matriz, BFA, acordó ayer la salida de su director general, Matías Amat, un hombre de confianza del anterior presidente de Caja Madrid, Miguel Blesa. Le sustituirá en el cargo Manuel Lagares. Mientras, José Manuel Fernández Norniella gana peso en la entidad al ser nombrado adjunto a la presidencia.
La llegada de Francisco Verdú como consejero delegado a Bankia el pasado mayo parecía que cerraba el organigrama del grupo. Pero no ha sido así. Se formó una cúpula que sirvió para que la entidad saliese a Bolsa. Ahora, Verdú quiere formar su propio equipo. De momento, los primeros cambios ya se empiezan a concretar. Ayer, el consejo de administración de BFA, la matriz de Bankia, acordó la salida de Matías Amat, que con 58 años se prejubila. Será sustituido por Manuel Lagares Gómez-Abascal, de 41 años, y hasta ahora consejero delegado del Grupo Neinver y presidente ejecutivo de Irus European Retail Property Fund.
Matías Amat era uno de los hombres de confianza del anterior presidente de Caja Madrid, Miguel Blesa, y había ocupado el cargo de director financiero de la entidad. El pasado diciembre fue nombrado director general de Bankia y designado a cargo de las participadas, aunque seis meses más tarde fue trasladado a BFA. Según el comunicado remitido ayer por la entidad, Matías Amat había solicitado acogerse al plan de prejubilaciones puesto en marcha por Bankia a principios de este año, pero el propio Rodrigo Rato le pidió que retrasara esta decisión hasta que se completara la salida a Bolsa el pasado julio.
Otro de los cambios ha sido reforzar los poderes de José Manuel Fernández Norniella, actual vicepresidente de Caja Madrid y consejero ejecutivo de Bankia. El directivo, de 66 años de edad, ha sido nombrado adjunto a la presidencia del grupo, cargo que le permite incorporarse al comité de dirección de Bankia y, por lo tanto, recibir el reconocimiento oficial de ser el ejecutivo más influyente del grupo tras su presidente Rodrigo Rato.
Varias fuentes aseguran que es un cargo creado ad hoc para Norniella. Sus funciones están sin definir, lo mismo que su sueldo, que debe pasar aún por la comisión de retribuciones. Todas las fuentes aseguran que Norniella, amigo personal de Rato, es el número dos del grupo al tener un puesto totalmente vinculado a la figura del presidente. Algunas fuentes interpretan el ascenso de Norniella como un posible recambio en la cúpula del banco en caso de que el exvicepresidente económico bajo el Gobierno de Aznar decida retornar a la política tras una victoria del PP en las Elecciones Generales del próximo noviembre.
Algunas fuentes cercanas a la entidad aseguran, además, que el paso de los meses ha evidenciado que Bankia necesita una nueva estructura y cuadro directivo, sobre todo en el área comercial. La dirección general de negocios, de la que cuelga la banca comercial, está liderada por Aurelio Izquierdo, quien ocupaba este puesto en Bancaja. Si bien no hay confirmación, todo apunta a que esta será una de las áreas que sufrirá más cambios, entre los que podría encontrarse la salida de Izquierdo. Ramón Ferraz, responsable de EE UU y proveniente del equipo de Blesa, también podría abandonar Bankia. Su salida estaba prácticamente descontada desde junio, cuando regresó a Madrid desde Miami para jubilarse. El puesto de Ildefonso Sánchez Barcoj, director general financiero y de riesgos de Bankia, también es objeto de rumores sobre su posible marcha. También proviene de Caja Madrid.