El Parlamento chipriota debate medidas de austeridad por 600 millones
El Parlamento de Chipre debate hoy medidas de austeridad por unos 600 millones de euros, propuestas por el Ejecutivo para reducir el déficit, después de que su deuda fuera degradada por dos agencias de calificación, que advirtieron que el país podría necesitar un rescate de la Unión Europea (UE).
La aprobación de las medidas no está garantizada debido a que el Gobierno de centro-izquierda se encuentra en minoría y no existe un consenso con la oposición.
El paquete de austeridad incluye un aumento del IVA en dos puntos, la congelación de los sueldos del sector público por tres años y una rebaja salarial del 10 % para los funcionarios de nueva incorporación. Además se incrementará en cinco puntos el impuesto sobre las renta a aquellos que ganen más de 60.000 euros y se reformará la tasación fiscal sobre los bienes inmobiliarios.
Con estas medidas se pretende contener el déficit este año en el 5,5 %, situarlo por debajo del 3 % en 2012 y alcanzar el equilibrio presupuestario en 2013, según el ministro de Economía, Kikis Kazamias. La mayor formación opositora, la conservadora DISY, exige profundizar en las reformas y recortes para alcanzar el equilibrio presupuestario el próximo año.
La agencia de calificación Standard & Poor''s situó el pasado día 12 en observación con "implicaciones negativas" su valoración de la deuda soberana de Chipre, al entender que el Gobierno tendrá difícil aprobar medidas para reducir el déficit.
Las agencias Moody''s, el 27 de julio, y Fitch, el 10 de agosto, ya rebajaron sus calificaciones de la deuda chipriota.
El recientemente remodelado Gobierno de Chipre se encuentra bajo presión por las críticas políticas y las protestas sociales causadas por la explosión el 11 de julio en una base naval que afectó a la mayor planta de generación de energía eléctrica de la isla.
Las estimaciones de los daños que la explosión y la posterior caída del suministro eléctrico asciende según los expertos a cientos de millones y ha alejado al Ejecutivo de su objetivo inicial de bajar el déficit al 4 % este año desde el 5,3 % registrado en 2010.
Kazamias prometió que presentará un segundo paquete de austeridad, más centrado en recortes y medidas de ahorro, tras la aprobación del primero.