Suiza y Alemania sellan un plan para evitar la evasión fiscal
Las autoridades alemanas y suizas llegaron ayer a un acuerdo para poner fin a la evasión fiscal de los contribuyentes alemanes mediante el uso de cuentas en entidades bancarias en Suiza, gracias al cual el fisco alemán podrá recuperar miles de millones de euros no declarados, según informó el Ministerio suizo de Finanzas en un comunicado.
Según destacaron ambos países, el acuerdo, que será firmado por ambos gobiernos en las próximas semanas y que podría entrar en vigor a principios de 2013, no solo respeta la privacidad de los clientes bancarios, sino que también asegura la implementación de las legítimas reclamaciones de impuestos.
El acuerdo, que pone fin a las negociaciones que representantes de ambos países mantenían sobre cuestiones fiscales, recoge que los contribuyentes alemanes cumplan con sus obligaciones fiscales de forma retroactiva mediante el pago de un único impuesto o desvelando sus cuentas.
Con el objetivo de asegurar unos ingresos mínimos derivados de estos impuestos, así como para resolver la implementación del acuerdo, los bancos suizos pagarán 2.000 millones de francos (1.993 millones de euros) al Estado alemán en calidad de garantía.
Asimismo, ambas naciones acordaron que los ingresos de inversiones futuras y las ganancias de capital de los clientes bancarios alemanes en Suiza estarán sujetas a una retención final del 26,37%, similar a la que existe en Alemania. Al mismo tiempo, el acceso mutuo a sus mercados de servicios financieros "será mejorado".
Con el fin de evitar que nuevos fondos no declarados se depositen en Suiza, se ha acordado que las autoridades alemanas puedan presentar solicitudes de información en el contexto de un mecanismo de seguridad en el que debe constar el nombre del cliente, pero no necesariamente el nombre del banco.
algunos límites
l El pacto sellado entre los Ejecutivos de Suiza y Alemania para luchar contra la evasión de impuestos tendrá límites. El número de solicitudes de información que podrá presentar el Ejecutivo alemán estará topado, hasta 999, y deberán existir motivos plausibles.