El recorte presupuestario pasa factura a los resultados de Santa Bárbara
Los ajustes presupuestarios en Defensa se han hecho notar para todas las empresas del sector en España. Santa Bárbara Sistemas cerró 2010 con un desplome de su beneficio, que se redujo a la mitad. Además, acumuló 1.012,8 millones de euros en obra ejecutada y sin facturar.
Santa Bárbara Sistemas (SBS), la antigua empresa nacional reconvertida ahora en filial de la estadounidense General Dynamics (GD), tampoco escapa a la crisis. Pese a ser una de las principales empresas del sector en España, los ajustes en el presupuesto público de Defensa han hecho mella en la cuentas del grupo.
Según el último balance anual, depositado recientemente en el Registro Mercantil, el beneficio de SBS en 2010 cayó un 47,5% y se redujo a los 15,8 millones de euros. En la misma línea, el resultado de explotación se derrumbó un 58,2%, hasta situarse en 13,1 millones. El recorte en la cifra de negocios fue más moderado (del 14,8%), lo que dejó la facturación en los 310,4 millones.
Al cierre del ejercicio, la cartera de pedidos de SBS ascendía a 823 millones frente a los 908 millones de finales de 2009. A lo largo del año pasado, el grupo consiguió modificar parte del contrato para la segunda fase del blindado Pizarro; se adjudicó el suministro de una decena más de los vehículos 4x4 RG-31; y, sobre todo, logró participar en el contrato que se adjudicó la filial británica de GD para el programa de blindados del Reino Unido. En concreto, SBS diseñará y fabricará seis prototipos del Ascod SV, por 157 millones de euros ampliable a otros 10 millones, hasta 2015.
"Este contrato abre la puerta a la sociedad para la entrada en nuevos mercados relacionados con esos vehículos de cadenas", subraya el grupo en su informe de gestión.
Incertidumbres
Para el futuro hay más incertidumbres. Santa Bárbara tenía su esperanza puesta en el concurso de Defensa para un nuevo blindado 8x8, que podría superar los 1.000 millones de euros. Los problemas presupuestarios y la inminencia de las elecciones hacen lógico pensar que el programa pueda retrasarse, al menos, otro par de años.
Tampoco está claro la posible venta por parte de España de unos 250 Leopard a Arabia Saudí, un contrato que, al final, podrían acabar rentabilizando Alemania y sus empresas Krauss-Maffei Wegmann y RheinMetall, propietarios de las patentes del tanque, frente a SBS y la industria española.
La situación presupuestaria de Defensa (que supone el 86% de las ventas del grupo) también se deja notar en otro punto: a 31 de diciembre de 2010, SBS acumulaba 1.012,8 millones de euros en obra ejecutada pendiente de facturar. En cuanto a los anticipos reintegrables recibidos por parte del Ministerio de Industria para financiar sus trabajos, el montante pendiente de devolver (más o menos hasta 2025) asciende a 2.412 millones de euros. Esta cifra se corresponde con saldos pendientes de cobrar de Defensa.
Un año más, la auditoría de SBS subraya que la empresa no da datos de los sueldos de los consejeros ni la alta dirección. El grupo alega "razones de confidencialidad". La matriz GD, sin embargo, sí detalla la retribución de sus consejeros en el informe anual.
Por otro lado, SBS acaba de renegociar con Defensa el contrato de uso de las instalaciones y terrenos en los que realiza su actividad. Se prorroga el arrendamiento cinco años y se establece el pago de un canon de uso anual.