El Senado bloquea el plan demócrata para elevar el techo de deuda
No hay acuerdo sobre la deuda. Tras una jornada frenética, y cuando todos daban por seguro un acuerdo, el Senado bloqueó el plan del senador Harry Reid al no alcanzar los 60 votos necesarios. Existe, sin embargo, un optimismo moderado en torno a las negociaciones in extremis que están manteniendo los republicanos y la Casa Blanca. El líder demócrata en el Senado, Harry Reid, ha dicho que espera que su cámara vote esta noche (hacia las cinco de la mañana en España.
Ha sido un día frenético en los pasillos de la Casa Blanca. Líderes de ambos bandos aseguraban que el acuerdo se estaba acercando. La televisión ABC aseguró que ya había un pacto preliminar entre demócratas y republicanos que permitiría elevar el techo en 2,4 billones hasta las elecciones de 2012, recortar más de un billón de dólares en los próximos 10 años y la creación de una comisión que estudie ahorros por otro billón.
Poco después de las 19.00 la Casa Blanca anunciaba que los demócratas no habían logrado apoyos suficientes en el Senado para sacar adelante su propuesta para ampliar el techo de deuda en 2,4 billones de dólares, lo cual deja en suspenso la posibilidad de un default y de una rebaja de calificación de la deuda estadounidense
Con 50 votos a favor y 49 en contra, Reid no logró la mayoría de 60 votos que necesitaba para dar vía libre a la votación de su plan para elevar el techo de la deuda, que ya fue rechazado el sábado en el pleno de la Cámara de Representantes. El voto fue, sin embargo, un mero procedimiento legislativo que no valora aún el contenido del plan de Reid y que queda en un segundo plano frente al potencial acuerdo que parece estar tomando forma en negociaciones a puerta cerrada entre el Congreso y la Casa Blanca.
El director de Comunicación de la Casa Blanca, Dan Pfeiffer, lo anunció en su twitter, a la vez que afirmaba que había "mucha información errónea circulando". El líder demócrata en el Senado, Harry Reid, recién salido de las negociaciones con republicanos y la Casa Blanca, ha comparecido para decir que el voto sobre el techo de endeudamiento se retrasa porque no hay acuerdo definitivo todavía. "Estamos haciendo avances", ha dicho. Sin embargo, ha reconocido avances para alcanzarlo antes de fin del plazo el 2 de agosto.
Y es que tanto medios como congresistas y senadores han ido dando sus versiones de lo que iba sucediendo intramuros. El líder de la minoría republicana en el Senado, Mitch McConnell, había confirmado en una entrevista en la cadena CNN los rumores de que los legisladores republicanos y demócratas habían llegado a un principio de acuerdo con la Casa Blanca, en intensas negociaciones a puerta cerrada durante el sábado. "Estamos muy cerca. Ayer tuvimos un muy buen día, e hicimos avances drásticos", aseguró el senador republicano.
El senador demócrata Charles Schumer subrayó que aún no se ha alcanzado "ningún acuerdo final", pero aseguró que "lmás importante hoy es que ha habido conversaciones constructivas entre los líderes, y que la moratoria está mucho más lejos de lo que estaba ayer".
Rayo de luz
Un rayo de luz pareció encenderse én las últimas horas. Era la 1 de la madrugada hora de Washington, las 7.00 hora peninsular española. El Senado se preparaba para una nueva votación sobre el plan demócrata para imponer un plan de austeridad que permita elevar el techo de deuda de 14,3 billones de dólares. El líder de la mayoría demócrata en el Senado de EE UU, Harry Reid, ha decidido aplazar hasta el mediodía de hoy (tarde del domingo en España) este voto, para dar tiempo a las negociaciones con los republicanos sobre un acuerdo bipartidista que evite la suspensión de pagos, el 2 de agosto.
Ha sido un fin de semana de infarto en este aspecto, que amenaza con dejar al Tesoro estadounidense sin fondos suficientes para hacer frente a sus compromisos. La Casa Blanca y el Capitolio continuaron ayer sábado sus negociaciones, con el propio presidente de EEUU, Barack Obama, inmerso en conversaciones con demócratas y republicanos.
Poco antes, en lo que resultó una agitada votación, la Cámara de Representantes (de mayoría republicana) rechazó, por 246 contra 173 votos, la propuesta demócrata para elevar el techo de la deuda, que ahora se sitúa en 14,3 billones, antes aún de que el Senado iniciara siquiera los trámites para votarla.
Los republicanos devolvían así el golpe que el Senado (de mayoría demócrata) asestó el viernes a la propuesta del presidente de la Cámara Baja, John Boehner, al bloquearla poco después de que fuera aprobada en ese hemiciclo, después de duras concesiones de los republicano sal ala dura de su partido, el Tea Party.
El líder de la minoría republicana en el Senado, Mitch McConnell, aseguró en una conferencia de prensa tras la votación que había hablado ayer por teléfono tanto con el vicepresidente, Joe Biden, como con Obama, y opinó que el mandatario debería estar presente en cualquier negociación para llegar a un consenso. "Confío plenamente en que lograremos un acuerdo en un futuro muy próximo", aseguró McConnell, mientras que Boehner subrayó que los estadounidenses pueden estar seguros "de que esta crisis se acabará" y de que "no habrá cese de pagos".
Ese optimismo contrastó con la frustración que Reid expresó más tarde en el pleno del Senado, después de una visita a la Casa Blanca junto con la líder de la minoría demócrata en la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi.
Para zanjar el debate en torno a su medida, Reid necesitará en la votación de hoy domingo una mayoría de 60 votos, lo que obliga a los demócratas, que controlan la Cámara Alta, a asegurarse el respaldo de al menos siete republicanos. Ese objetivo parecía ayer lejano cuando McConnell entregó a Reid una carta en la que 43 de los 47 senadores republicanos se comprometían a votar en contra.
Reid ha modificado en los últimos días su plan para añadirle elementos impulsados por McConnell, y su propuesta incluye ahora una elevación de la deuda en dos fases, hasta llegar a 2,4 billones, y una reducción del déficit en 2,2 billones de dólares en la próxima década.
No obstante, carece de un mecanismo que establezca cómo actuar si el Congreso no consigue reducir el déficit en los niveles esperados, lo que se ha convertido en el principal argumento de muchos republicanos para rechazar el plan. "Es hora de que acabemos con este teatro del absurdo", dijo tras la votación en la Cámara Baja una decepcionada Nancy Pelosi, que instó a los legisladores de ambos partidos a lograr una solución 'real'.
Límite
Estados Unidos no puede endeudarse ilimitadamente. El máximo al que puede ascender esa deuda tiene que aprobarse en el Congreso. A lo largo de los años se ha alcanzado repetidas veces, pero el partido republicano y el demócrata se han puesto de acuerdo para elevarlo, algo que en esta ocasión está siendo más complicado.
El techo asciende a 14,29 billones de dólares y ya se ha alcanzado. Sucedió en mayo, pero existen mecanismos legales que han permitido aplicar una prórroga que se termina el dos de agosto. Es entonces cuando, de no llegar a un pacto, se produciría una situación "de consecuencias impredecibles", según palabras del presidente Barack Obama.