El Tesoro salva otra emisión de letras con tipos en máximos de tres años

El Ibex respondió con una caída del 1% al resultado de la subasta del Tesoro, que tuvo que pagar para las letras a tres meses el mayor coste en tres años. Al cierre redujo la caída hasta el 0,33%, al tiempo que la prima de riesgo continúa en los 320 puntos básicos.

La Bolsa pudo recuperar cierta confianza ayer al cierre tras el duro vuelco que había sufrido al mediodía como consecuencia de la subasta de letras del Tesoro. El selectivo pasó de perder el 1% tras conocer el resultado de la emisión a cerrar con un recorte del 0,33%, con la prima de riesgo estabilizada en 320 puntos básicos.

El erario ha conseguido llegar al objetivo de la subasta tras emitir 3.000 millones de euros en letras a corto plazo, pero a un tipo de interés elevado. Para las de tres meses se ha pagado un tipo marginal del 1,950%, el más alto en tres años. La demanda aunque ha sido alta, por encima de los 4.700 millones, se ha reducido frente a la registrada hace un mes; la ratio de cobertura ha pasado de 9,5 veces a 6,27. Para las letras a seis meses el erario ha pagado un 2,650%, el mayor coste desde diciembre de 2010. La ratio de cobertura se estrechó desde las 3,8 veces a 2,15.

Italia, que ha sido en lo últimos días el país de mayor contagio por la crisis griega también subastó deuda de seis y 24 meses. Adjudicó un total de 9.000 millones con mayor coste, del 2,269% y 4,038%, respectivamente. La Bolsa de Milán sumó el 0,3%.

En el resto de plazas europeas predominaron las pérdidas, aunque no llegaron al 1%. En el parqué griego hubo otro desplome de la banca, liderado por el EFG Eurobank (-7,8%) y Bank of Cyprus (-7,7%). De vuelta al parqué español, el sector financiero también acumuló los mayores descensos. BBVA perdió el 2%, Santander, el 1,2% y Popular, el 1,7%.

Aparte de los problemas de la deuda periférica europea, el mercado sigue pendiente de la situación política en EE UU, con demócratas y republicanos enzarzados en una batalla sobre el techo de endeudamiento que amenaza a la mayor economía del planeta con una rebaja de calificaciones o, lo que es peor, con un default. El plazo para llegar a un acuerdo concluye el próximo 2 de agosto.

Las agencias de rating tampoco están contribuyendo a calmar a los mercados, y han rebajado la deuda soberana griega al antepenúltimo escalón antes del impago, poniendo en perspectiva negativa a ocho entidades financieras del país.

Al mismo tiempo, continúan publicándose referencias económicas y empresariales, que en el caso del S&P están dejando una buena sensación a los inversores. Los próximos dos días serán importantes para la Bolsa española, ya que las grandes empresas del Ibex darán a conocer su situación financiera en el primer semestre.

En medio de tanta incertidumbre, el oro ha vuelto a emerger como refugio inexpugnable. El metal se ha convertido en el activo preferido en momentos de nerviosismo y mantiene el nivel récord alcanzado la sesión anterior por encima de los 1.614 dólares.

En cuanto al euro, sigue reflejando la falta de acuerdo entre demócratas y republicanos para elevar el techo de endeudamiento. En dos días ha pasado de 1,436 a 1,451.

Wall Street se está tomando la situación con tranquilidad y permanece cerca de máximos. El S&P bajó ayer el 0,41%, y el Dow Jones y el Nasdaq, el 0,73% y el 0,10%.

Por su parte, el multimillonario inversor estadounidense George Soros ha decidido poner fin a su carrera como gestor de fondos tras casi cuarenta años en los mercados al cerrar su hedge fund que se transformarán en una firma para la gestión de su patrimonio familiar, a raíz del endurecimiento de la legislación financiera en Estados Unidos, que obliga a los fondos que gestionen activos de terceros a desvelar sus prácticas.

La cifra

-5% pierde el Ibex en lo que va de julio. Quedan tres sesiones para enderezar el resultado, que apunta a uno de los peores del año.

El seguro de impago de la banca se dispara

La crisis de la zona euro ha puesto a la banca en la diana de los inversores. Las entidades financieras europeas pierden el 10,2% en 2011. Las dudas que han vuelto a asaltar a los analistas por los efectos del rescate griego sobre ciertas economías periféricas como la española pueden comprobarse también en el alza de los credit default swaps (CDS). Su cotización vuelve a acercarse a los máximos históricos que tocaron hace justo una semana, por las dudas que había entonces sobre el rescate a Grecia.Los CDS a cinco años (el más común) de Banco Santander llegaron ayer a 248,2 puntos básicos, frente a los 237,5 del día anterior. Es decir, cubrir una emisión de 10.000 euros de deuda del banco cuesta 248,2 euros. En abril, la cotización de estos instrumentos del banco que preside Emilio Botín estaba en 164,8.Su rival, BBVA, presenta un diferencial algo más alto, en 262,16 puntos básicos.La evolución es aún más palpable en el caso del Banco Pastor, una de las cinco entidades que suspendieron los test de estrés. El diferencial que está pagando la entidad gallega está en 748,4, acercándose al pico de 800 puntos básicos que registró el 19 de julio.Entre las excajas, los CDS de Bankia cotizaban ayer en 362,8, cuando hace una semana se encontraban en 580. Por su parte, los seguros de impago de CaixaBank repuntaron a 295 puntos básicos. A principios de abril, no obstante, la baja demanda dejaba el precio en 238 euros. Los CDS de la CAM, por cierto, han casi doblado su precio en los últimos cuatro meses: han pasado de los 451 de abril a los 842 de ayer.En cuanto a los CDS de deuda soberana, en el caso español están a 335,5 puntos básicos, por debajo de los 384,5 del 18 de julio.