Oesía ultima el saneamiento del balance y un recorte de plantilla
Oesía Networks celebrará mañana jueves su segunda junta extraordinaria de accionistas en 30 días, en un nuevo intento para cerrar el saneamiento de su balance y un ajuste de plantilla que afectará a 400 empleados, más del 11% de los 3.500 trabajadores actuales.
Los principales accionistas del grupo de tecnologías de la información (Banca Cívica con casi el 40%, además de las entidades BMN y Corporación CCM) afrontan la junta en Bilbao con un orden del día centrado en la puesta en marcha de una ampliación de capital. Los fondos que aportarán las cajas (que concentran el 90% de los títulos) serán fundamentales para el saneamiento del balance de Oesía Networks, que arrastra unas pérdidas de 90 millones en los dos últimos años.
En la junta del pasado 29 de junio, las entidades analizaron la compensación de créditos, mediante la capitalización de los mismos. Oesía consiguió en 2010 una financiación de 75 millones aportada por 75 bancos y cajas, entre ellos sus accionistas. Una vez analizado el capítulo de la conversión de deuda en títulos, el grupo de tecnologías de la información reclama ahora a sus socios una aportación dineraria. Parte del nuevo capital se utilizará en la financiación de un ajuste de plantilla, donde se quieren recortar 400 empleos. Más de la mitad (250 personas) a través de la próxima presentación de un expediente de regulación de empleo (ERE).
El resto de los afectados por esta reconversión laboral serán los trabajadores con contratos temporales, que en su mayoría no se renovarán. Estas medidas afectarán a más del 11% de las personas que actualmente forman parte de Oesía Networks.
La junta extraordinaria de accionistas de este 28 de julio en Bilbao también analizará la incorporación de nuevos inversores que puedan aportar capital y negocio. A falta de los datos oficiales de 2010, el grupo de tecnologías de la información facturó en 2009 casi 220 millones. Según su información corporativa, cuenta con 700 clientes, repartidos por España (14 delegaciones con la sede de Madrid), Portugal y América. Al otro lado del Atlántico cuenta con oficinas en Estados Unidos, Brasil, México, Colombia y Perú. Sus operaciones se extienden por Francia, Panamá y Cuba.
Oesía nació en Bilbao con la denominación de IT Deusto en el año 2000, impulsada por un grupo de profesionales de tecnologías de la información relacionados con la Universidad de Deusto. Al frente de ellos, el empresario vasco Tomás Ariceta, en su día fundador de la empresa del sector Ibermática. Ariceta pilotó el crecimiento del grupo en base a una estrategia de compra de compañías de tamaño mediano y pequeño que paulatinamente se integraban en su estructura. El objetivo a medio plazo era la salida a cotización en Bolsa de la antigua IT Deusto.
La actual Oesía cuenta entre sus principales clientes institucionales con los ministerios de Defensa, Sanidad y Justicia. También tiene una importante presencia en el sector financiero.
En marzo pasado, Javier García Pellejero asumió la gerencia de la compañía, en sustitución de Abel Linares, que hasta entonces concentraba todo los poderes ejecutivos como presidente y consejero delegado.
Afectados
400 empleados del grupo de tecnologías de la información se verán afectados por un plan de ajuste de plantilla (más del 11% de un colectivo de 3.500 personas). Un ERE alcanzará a 250 y el resto serán contratos temporales que no se renovarán.
Auditoría de KPMG a la gestión de Abel Linares
Los principales accionistas del grupo de tecnologías de la información, con Banca Cívica al frente, han encargado a la firma KPMG una auditoría de la etapa en la que Abel Linares asumió la gestión de Oesía Networks. Linares coordinaba todas las labores ejecutivas desde su puesto como presidente y consejero delegado. En marzo pasado, el consejo de administración de Oesía anunció el cese de Linares y el posterior nombramiento de Javier García Pellejero como consejero delegado, pero marcando una bicefalia en la dirección del grupo al designar a Rafael Delgado como presidente del consejo de administración hasta entonces vicepresidente y consejero. Linares tomó el mando en 2008, tras la salida de uno de los fundadores, y anterior líder de la corporación de tecnologías de la información, Tomás Ariceta. A partir de ahí cambió el nombre del grupo, del inicial IT Deusto a la actual denominación de Oesía, y Linares aceleró en el crecimiento corporativo mediante la fórmula de compra de empresas del sector. La auditoría de KPMG analizará la posible sobrevaloración en el coste de algunos proyectos y las inversiones realizadas, por ejemplo, a programas de I+D. El examen de las cuentas de la etapa de Linares será, por tanto, exhaustivo.