La banca no siempre gana
El plan de Sarkozy para la participación de la banca en la reestructuración griega relaja al Ibex que cierra con una subida del 0,61% y permite a la prima española estabilizarse en los 280 puntos tras llegar a tocar los 293 puntos básicos. Una moderación de la que no puede disfrutar la banca europea, principal damnificada de la propuesta gala.
Banca gana. Estas dos palabras se hacen habituales desde una edad temprana. Como niño por ser recurrentes en el conocido juego de mesa Monopoly, y después por representar la realidad de un sistema financiero en el que las entidades nunca pierden. Sin embargo, esto puede cambiar. La intención del Eurogrupo de que el sector privado se implique en la reestructuración griega hace inevitable que la banca europea, especialmente francesa y alemana, asuma parte de las pérdidas. Un escenario que tras el anuncio realizado por Sarkozy parece cada vez más cercano. Esta situación deja entrever una solución (aunque sea momentánea) al laberinto heleno, lo que ha permitido un avance en el Ibex, que ha cerrado con una subida del 0,61%, y un relajo en la prima de riesgo, que se ha estabilizado en los 280 puntos tras llegar a tocar los 293 enteros.
A este relativo relajo no se ha podido unir la banca que ha cerrado la sesión con pérdidas, especialmente en Francfort y París. El índice germano, que ha cerrado plano, ha visto como el Commerzbank cedía un 4,15%, seguido de lejos por Deutsche Bank que perdía un 1,24%. Mientras tanto, el índice galo cerraba en positivo aunque con BNP, Societé Generale, y Crédit Agricole despuntando levemente en rojo. Una tendencia de la que se han salvado prácticamente la totalidad de las entidades españoles debido a su baja exposición a la deuda griega. A pesar de ello, Sabadell no ha podido librarse de cerrar con un descenso del 0,32%.
Tras este, todavía precario acuerdo, la atención está puesta en lo que ocurra en la plaza ateniense de Syntagma. Allí, el Parlamento se reúne desde hoy para debatir sobre el nuevo plan de ajuste 2012-2015 que se someterá a votación el miércoles y que la UE ha puesto como requisito indispensable para la liberación de los 12.000 millones de euros relativos al quinto tramo del plan de rescate financiero. Una polémica cita que se irá calentando desde el día antes cuando dé inicio la enésima huelga general convocada por los principales sindicatos del país. Complejo escenario que tendrá su continuación 24 horas después con un nuevo paquete de medidas fiscales adicionales que Papandreu quiere sacar adelante para reforzar la confianza en su ejecutivo de cara a negociar un segundo paquete de ayudas.
Esta tensión sigue castigando a todo lo que huele a periferia, algo que puede atestiguar fehacientemente la troika de los países rescatados. Tanto Grecia, Irlanda y Portugal, sigue batiendo récords. La rentabilidad exigida a sus bonos a diez años, plazo utilizado como referencia en el mercado, sigue marcando máximos desde la entrada en vigor del euro. La situación deja en evidencia que los plazos establecidos por Bruselas y el FMI para que estos países pudiesen regresar al mercado en condiciones normales han resultado fallidos. A pesar de ello, el euro consigue aguantar el tipo y remonta hasta rozar los 1,43 dólares, tras 3 jornadas consecutivas en negativo y haber llegado a perder los 1,41 billetes verdes.