El OIEA propone inspecciones aleatorias a todas las centrales nucleares
El director general del OIEA, Yukiya Amano, propuso hoy, al comienzo de la conferencia ministerial sobre seguridad nuclear en Viena, que su organismo realice inspecciones aleatorias en todas las plantas atómicas del planeta.
"Saber que cualquier planta puede ser objeto de una revisión le daría a los operadores un incentivo adicional para aplicar los más elevados niveles de seguridad (atómica)", dijo el responsable del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA).
Ante unos mil delegados reunidos en la capital austríaca, el japonés Amano aseguró en su discurso inaugural del foro que "es posible" reforzar el régimen internacional de seguridad nuclear "en un período de 12 a 18 meses".
"Muchas medidas concretas pueden ser introducidas hacia final de 2012, otras necesitarán más tiempo. Los próximos meses serán cruciales para tomar medidas y para crear el fundamento sólido para el futuro", aseguró el director general.
Amano dijo que la conferencia de Viena, que ha reunido a ministros de unos treinta países y expertos de todo el mundo, es "crucial para el futuro de la energía nuclear". Reconoció que la confianza pública en la seguridad de la energía atómica ha sido "duramente dañada".
No obstante, la energía nuclear seguirá siendo un importante factor para muchos países, por lo que es esencial que las medidas más severas de seguridad sean aplicadas en todo el mundo, agregó. "Hacer como si nada hubiese ocurrido no es una opción", manifestó Amano en su alocución.
El director general precisó que la comunidad internacional debe "fortalecer" los estándares de seguridad del OIEA y "asegurar" que son universalmente aplicados.
Por eso, la comisión del OIEA encargada de las normas de seguridad deberá revisar los estándares relevantes y elaborar en cuestión de doce meses un informe con recomendaciones para fortalecerlas.
Es que la aplicación de normas de seguridad es clave porque los mejores estándares de seguridad son inútiles si no son aplicados correctamente, dijo Amano.
En ese sentido, propuso que la seguridad de las 440 plantas nucleares del mundo sea supervisada de forma sistemática y regular, algo que deben realizar los reguladores nacionales y también por el propio OIEA.
Amano propuso un nuevo análisis de riesgo para las plantas nucleares que incluya márgenes de seguridad contra catástrofes naturales extremas, como terremotos, tsunamis e inundaciones.
Para ello propuso elaborar, en un período de doce a dieciocho meses, nuevos parámetros de seguridad, con análisis nacionales como punto de partida, si bien éstos deben ir acompañados por revisiones periódicas del OIEA.
Revisar todas las 440 plantas del mundo no es realista, reconoció el director general, por lo que propuso un plan para inspeccionar un 10% de las instalaciones, seleccionadas de forma aleatoria, en un período de tres años, comenzando a más tardar a finales de 2012.
Según los planes del OIEA, esos informes de seguridad deben darse a conocer a todos los países miembros del organismo y luego ser seguidos por misiones que aseguren la posterior puesta en práctica de las recomendaciones.
Por otra parte, el director general exigió más fondos para su organismo en caso de que la comunidad internacional decida pedirle más asistencia y servicios en materia de seguridad.