Abertis, interesado en la privatización de Barajas y El Prat
La concesión de los dos mayores aeropuertos de España, el madrileño de Barajas y el Prat de Barcelona, cuyo proceso de adjudicación está previsto para este año despertarán gran expectación entre los operadores "nacionales e internacionales", adelantó ayer el presidente de Abertis, Salvador Alemany. Su propio grupo, admitió, "estudiará con detenimiento" ambos contratos pues los considera de "mucho interés".
Barajas y El Prat son los mayores aeropuertos españoles, con un total de 49,86 millones de pasajeros en el caso del madrileño y 29 millones en el barcelonés, según datos de Aena de cierre de 2010. Además, fueron de los que más crecieron en este pasado año: un 6,5% El Prat y un 3% Barajas.
Alemany, que participaba en los cursos de verano de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo, en Santander, negó que Abertis esté planeando nuevas ventas de activos para obtener liquidez. Así, la desinversión se ceñiría a Atlantia, de la que salió en enero, y Brisa, de la que ya había dicho que se trataba de "un activo no estratégico".
Por otra parte, el presidente de Abertis criticó duramente la creación de infraestructuras no rentables que ha acometido España en los últimos tiempos y que denominó "elefantes blancos".
Citó, sin dar nombres, "algunos aeropuertos" a los que no se les da uso, y "algunos tramos del tren de alta velocidad" que se están llevando a cabo. "Si hay dinero no hay problema pero si no lo hay sí", sentenció. Se trata de proyectos, continuó, que pueden resultar interesantes "dentro de 20 años, pero eso es mucho tiempo". Finalmente, Alemany se mostró comprensivo con la caída de la inversión pública en infraestructuras dado que en tiempo de recortes "primero son las personas", y el gasto en educación o sanidad, por lo que entiende como "lógico" que se antepongan estos servicios primarios a determinadas obras.
Inversiones
El presidente de Abertis, Salvador Alemany, consideró lógico que se pospongan las inversiones en infraestructuras en pro de la inversión en los ciudadanos, situación económica que no se da en otros países como India, China o Estados Unidos.